Saltar al contenido

@calibre321

Esta no es una historia sobre el Rolex Hermetic de Hans Wilsdorf, ni sobre el Pasha de Cartier, o incluso el Omega Marine. Y ciertamente no es una historia sobre el Submariner, el Ploprof o el Radiomir. Esos primeros e innovadores relojes estancos y las leyendas posteriores entre los relojes de buceo tienen su propia historia. No. Esta es la historia del menos anunciado… el primo pobre… el “Skin Diver”.

Nota del editor: 
Este artículo está escrito por @calibre321 (Robi). Apareció por primera vez en su blog calibre321.com el 11/1/2022. Reproducimos, con permiso, una versión traducida, editada y ampliada para poder llegar al público de lengua española.

blank
El Tressa Skin Diver de circa 1960.
Fuente: @vintage_chck

Sumerjámonos En El Tema….

Corre el año 1943. Imaginad, si queréis, a un joven comando y espía francés junto con su amigo, un ingeniero de la firma Air Liquide. Ambos están viviendo en la Francia controlada por los nazis. El espía es un explorador y un aficionado submarinista. Un aspirante a cineasta, si no fuera por la guerra. Para pasar el tiempo, los dos juguetean con el regulador de gasolina de un automóvil con la esperanza de que les permita hacer algo extraordinario: respirar bajo el agua. Ese día de otoño de 1943, mientras la guerra continúa, el joven francés se sumerge en la corriente fría del Marne para probar su invento por primera vez, una prueba que intentará con otros entusiastas más de 500 veces en los próximos meses.

¿Qué tiene esto que ver con un reloj, os preguntaréis?

Hay momentos en la historia que lo cambian todo. Algunos de ellos son como explosiones, eventos inolvidables que definen a una generación. El lanzamiento de la bomba atómica. El primer aterrizaje lunar. Otros son tranquilos y modestos, como Marie Curie y el descubrimiento de la radiactividad. O Tim Berners-Lee y la creación de la World Wide Web.

El nombre de ese espía era Jacques Cousteau. Su amigo, Emile Gagnan. Y su invento… el Aqua-Lung.

blank
Cousteau probando el Aqua-Lung en el Mediterráneo en 1943.
Fuente: https://us.aqualung.com/en/ourstory.html

El buceo había existido de alguna forma durante siglos antes de Cousteau, pero el Aqua-Lung permitía a los buceadores operar libremente bajo el agua, durante un período prolongado, sin ataduras a una fuente de oxígeno a bordo. En otras palabras, trajo el buceo a las masas.

Después de la guerra, el Aqua-Lung se fabricó y vendió a buceadores aficionados en Francia, llegando rápidamente a los entusiastas en el Reino Unido y en lugares tan lejanos como los Estados Unidos a principios de la década de 1950.

blank
Primera edición de la revista “Skin Diver”.
Fuente:
http://www.divinghistory.org/wp-content/uploads/2015/08/skin-diver-first-issue-1951.pdf

Accidentalmente, Cousteau había ayudado a generar el desarrollo de un nuevo deporte y marcar el comienzo de una era de exploración submarina. La revista Skin Diver se lanzó en el invierno de 1951. Christian Lambertson acuñó el término “SCUBA” (aparato de respiración subacuático autónomo) en 1952. El documental Le monde du silence de Cousteau se lanzó a una audiencia embelesada en 1955. En breve, en 1958, debutó en la televisión americana la pionera serie de aventuras Sea Hunt, protagonizada por Lloyd Bridges. De repente, el mundo se volvió loco por el océano.

La Aparición Del “Skin Diver”

El “Skin Diving” o buceo de superficie es, por definición, el acto de bucear sin la ayuda de un aparato de respiración artificial. Se ha practicado desde los albores de la antigua civilización griega.

blank
Titoni Seascoper con ETA 2452 de 77 rubíes. Medía 35 mm de diámetro y contaba con una longitud (“lug-to-lug”) de 44 mm. Llevaba un plexi y ofrecía 666 ft (100 m) de resistencia al agua.
Fuente: @vintage_chck

Entonces, ¿Qué tiene que ver todo esto sobre Cousteau y el Aqua-Lung? Bueno, es un poco como aquellos que compran el Omega Moonwatch sin intención de viajar al espacio. Es hacer cosquillas en la cola del dragón: experimentar de pequeña manera ese destello de peligro y aventura que está más allá de nuestro alcance, el deseo de desempeñar un papel, por pequeño que sea. En esa época, la gente buscaba ese factor “genial”.

blank
Versión de los años 60 del Zodiac Seawolf Datomatic.
Fuente: @matslean

En 1953, en respuesta a la creciente demanda de un método confiable de cronometraje bajo el agua, Zodiac y Blancpain lanzaron en la Feria de Basilea los primeros relojes de buceo dedicados con bisel giratorio. El Zodiac Seawolf, capaz de sumergirse hasta una profundidad de 100 m, llegaría a definir al arquetípico de skin diver.

Los relojes de buceo profesionales, como el Ploprof o el Sea Dweller, aparecerían al cabo de unos años y evocan imágenes de gruesas y pesadas cajas de acero con una resistencia al agua de 200, 500 e incluso 1.000 m. Pero no todo el mundo es buceador profesional. De hecho, la mayoría de las personas no son buzos en absoluto. Y aferrar un tanque a la muñeca no es del agrado de todos. Este es el término medio dominado por el skin diver.

blank
Bulova Snorkel de finales de los años 60 con calibre automático de 17 rubíes. Ofrecía una resistencia al agua de 666 ft (100 m). Medía 35 mm de diámetro y 43 mm de longitud (“lug-to-lug”). Llevaba un plexi abombado con magnificador de fecha. El ADN del Seawolf es claramente observable de su bisel metálico y el diseño de las asas.
Fuente: @vintage_chck

Si bien no existe una definición oficial de “Skin Diver”, generalmente se considera que es un reloj que ofrece una resistencia al agua de entre 100 y 200 m. Debido a la calificación más baja, tiende a ser más delgado y ergonómico que sus hermanos profesionales. Robusto, pero elegante. Los primeros ejemplos a menudo tenían cajas arqueadas con asas inclinadas y terminadas abruptamente que abrazaban la muñeca. Es típico ver altas cúpulas acrílicas y biseles delgados con borde de moneda. Y la mayoría de las veces, llevaban coronas grandes y desprotegidas. Eran deportivos, pero elegantes. Sus diámetros eran de entre 34 y 38 mm, aunque con algunas excepciones notables.

blank
El Royce Leadership era un Skin Diver de 36 mm con un calibre automático de 57 rubíes. Añadía una complcación de día a las 12 h además de la de fecha a las 3 h. Era un diver muy elegante.
Fuente: @bigblock94300

Hay un encanto casi libertino en estos primeros skin divers. Casi podríamos imaginar a James Bond emergiendo de una inmersión clandestina en territorio hostil y luego caminando con un esmoquin para tomar Martinis con una mujer fatal sin tener que cambiar su reloj. Ofrecían todo lo que uno podía necesitar para las aventuras de fin de semana junto al agua, pero se deslizarían con la misma facilidad debajo del puño de una camisa el lunes por la mañana.

Los primeros prototipos del Seawolf tenían un bisel para medir el tiempo transcurrido; sin embargo, los primeros modelos de producción lucían un bisel de cuenta regresiva, antes de volver a finales de los años cincuenta, a lo que se ha convertido en la norma en el mundo del buceo. La reciente reedición (por parte de Fossil Group) del Super Seawolf 53 Skin, se basa en un lanzamiento de la década de 1960 del Seawolf Datomatic. Este reloj incluía una complicación de fecha a las 3 y los ya icónicos índices triangulares a las 6, 9 y 12 h. Esta sería una configuración de esfera copiada por muchas otras marcas durante las décadas de 1960 y 1970.

blank
La reedición del 2019 del Zodiac Super Seawolf 53 Skin.
Fuente: https://calibre321.com/2022/01/11/other-watchy-bits-the-skin-diver/

Otro diseño seminal llegó a finales de la década de 1950 en forma del Longines Nautilus.

blank
Anuncio vintage de un Longines Skin Diver.
Fuente:
https://www.watchprosite.com/horological-meandering/looking-for-30mm-longines-high-domed-diver-crystal/17.727403.4773503/

Ervin Piquerez, que provenía de una familia de fabricantes de cajas (y que también dirigía un negocio de fabricación de bicicletas muy exitoso), concibió la nueva configuración. Inicialmente incluía un bisel de baquelita, aunque más adelante se consideró demasiado frágil para bucear. Esta caja, conocida como “Compresor”, fue patentada por Piquerez. Utilizaba un sello de junta tórica que aprovechaba la presión atmosférica bajo el agua y se volvía cada vez más hermético a medida que descendía el reloj. Hoy en día, los aficionados están más familiarizados con la versión arquetípica de dos coronas de este diseño (que utiliza un bisel giratorio interno) conocido como “Super Compressor”, también desarrollado por Piquerez.

El formato inicial fue adoptado por muchos otros fabricantes para sus skin divers, incluido el Bulova Snorkel de 1961.

Este diseño resultaría tan influyente que eventualmente se utilizaría en cronógrafos de carreras, como en el Heuer Autavia Dato de 1968. Más tarde, también se cruzó al mundo de los relojes de aviación, como en el Aéronavale Type 20 de Breguet o en el 103 Pilot Chrono de Helmut Sinn. También debo citar las mejoras de la hermeticidad dinámica de la caja tipo “Compressor” que concibieron los soviéticos con su icónico Amphibia 350.

Sin embargo, la caja que se asociaría más a menudo con los skin divers de mediados del siglo pasado sería concebida y refinada por la firma italo-suiza Squale (del término italiano “squalo”, tiburón en español). Comenzó a producir divers en 1959, pero principalmente fue un productor de cajas para otros fabricantes de relojes. Se verían relojes de Squale en las muñecas de algunos de los buceadores más aventureros de la época, incluidos las leyendas del “freediving” Enzo Maiorca y Jacques Mayol, inmortalizados en la película “El gran azul”, que es muy recomendable, por cierto. 

Las cajas de Squale se pueden encontrar en los relojes de prestigiosas marcas como Blancpain, Auricoste, Doxa y Heuer (luego Tag Heuer), además de muchas otras menos conocidas como Silvana, Elgin, Vetta, Darwil, Eagle Star, Dima, Jeder Mann y Navzer.

Aunque hoy en día apenas se consideraría un skin diver (dada su resistencia al agua de 50ATM), la forma del actual Squale 1521 tipifica el estilo emergente de los años 60 y 70.

blank
Fuente: https://www.safonagastrocrono.club/un-squale-completa-una-caja/

Pronto, otros creadores de cajas clamaron por entrar en el juego.

El fabricante de cajas francés Georges Monnin fue uno de los que tuvo más éxito. Monnin diseñó el primer reloj de buceo para Heuer, conocido como el Heuer 844. Estas cajas francesas también se pueden encontrar en relojes de la marca Aquadive.

blank
A diferencia de muchos otros Skin Divers, el Heuer Monnin usaba guarda coronas.
Fuente: https://www.pinterest.ca/pin/523332419193953532/

La manufactura suiza T.K. (Theordore Kagen) Company con sede en Nueva York también suministró sus ubicuas cajas de buceo a marcas más pequeñas y menos conocidas repartidas por todo el mundo.

Y por supuesto, está el que quizás sea el skin diver más famoso de todos, el 62MAS, lanzado por SEIKO en 1965. Este diver de 37 mm y con una resistencia al agua de 150 m se convertiría en el reloj con el que se compararían todos los skin divers.

blank
El SEIKO 62MAS estuvo en producción entre 1965 y 1968. Medía 37 mm de diámetro y su bisel era bidireccional.
Fuente: @vintage_chck

SEIKO lanzó una serie de relojes en homenaje al 62MAS en el 2020, incluida la edición limitada SLA017 y una serie de reinterpretaciones (la línea SPBXXX) lanzadas más ampliamente como parte de su serie ProSpex. Todos estos relojes han demostrado ser muy populares. Si os interesa, el compañero @jorgeju reseño el SPB143 en este mismo sitio web.

blank
Fuente: https://www.safonagastrocrono.club/resena-seiko-spb143/

En poco tiempo, todos los fabricantes, ya fuesen grandes o pequeños, contaban con un skin diver en su catálogo: Bulova, Caravelle, Ricoh, Technos, Tessa, Waltham, Wittenauer, Wolbrook, YEMA… la lista es inagotable.

blank
Caravelle Skin Diver.
Fuente: @vintage_chck

En 1961, incluso Rolex comenzó a distribuir un manual de buceo con la compra de su Submariner.

blank
La guia “Skin Diving” de Rolex.
Fuente:
https://www.watchprosite.com/rolex/rolex-vintage-brochure–skin-diver-handbook-/732.996893.7005578/

El encanto del “Skin Diver” es simple. Estos relojes evocaban un estilo de vida de fuerte individualismo. El subtítulo de la revista Skin Diver (como vimos al principio) fue originalmente “A Magazine for Skin Divers and Spearfishermen”. ¿Qué podría ser más viril que la imagen de un pescador submarino que sale del mar a grandes zancadas con un arpón en una mano, un leviatán colgado del hombro y un reloj de aspecto esbelto en la muñeca? Era un haz de luz inclinado hacia el oscuro corazón de los suburbios de la posguerra.

blank
La marca Technos fue fundada en Suiza en 1924, pero fue vendida durante la crisis del cuarzo (en 1982) a la firma japonesa Heiwado & Co. Renació en Brasil bajo el nombre Technos Relógios S.A. en el 2002. Esto “Skydivers” tempranos son ejemplos excelentes de la estética skin diver.
Fuente: @wabiwrist

Sin embargo, a medida que la década de los setenta llegaba a su fin, los gustos volverían a cambiar. La invención del cuarzo a fines de la década anterior (otro de esos eventos históricos silenciosos) se estaba apoderando rápidamente del mercado con ofertas de relojes más esbeltos, más precisos y menos costosos. Los relojeros tradicionales estaban siendo expulsados del mercado. Y el skin diver retrocedió en importancia.

Eso Es, Hasta Ahora

En la última década, marcas como Oris, SEIKO, YEMA, Tudor o Longines han aprovechado un renovado interés en los relojes automáticos, en gran medida debido al fenómeno de la viralidad en las redes sociales y la popularidad de medios en línea dedicados a los relojes como Fratello y Hodinkee. Este fervor ha provocado que estas marcas abrieran sus antiguos catálogos para reeditar y reimaginar algunas e sus viejas glorias.

Algunos incluso han resucitado marcas perdidas, explicando el renacimiento de Aquastar de mano del Synchron Group.

blank
La reedición del 2020 del Aquastar Deepstar.
Fuente: https://calibre321.com/2022/01/11/other-watchy-bits-the-skin-diver/

Y, por supuesto, micro marcas, como Lorier, Halios o Dietrich, también se han labrado un hueco en el mercado desde los márgenes.

blank
El contemporáneo Hydra V1 de Lorier.
Fuente: @leov_cars_watches
blank
El Halios Fairwind.
Fuente: https://calibre321.com/2022/01/11/other-watchy-bits-the-skin-diver/

Si bien las especificaciones han cambiado, el estilo no lo ha hecho. No es difícil entender el actual resurgimiento del “Skin Diver”. A medida que nuestro mundo se adentra cada vez más en lo virtual y lo sedentario, estos relojes ofrecen la misma bocanada de aire salado del mar y la ilusión de aventura que siempre ofrecieron. En la oficina, con un diver en la muñeca, es posible que mires hacia abajo y sueñes con “cruzadas” de fin de semana y escapadas al aire libre. ¿Y quién sabe? Una vez que tengáis el equipo adecuado, no podréis predecir qué hazañas alcanzaréis. Como escribió Tennyson: “Vengan, amigos míos, no es demasiado tarde para buscar un mundo más nuevo. Empuja y… golpea los surcos sonoros…”

blank
El Retras Dive Watch.
Fuente: https://calibre321.com/2022/01/11/other-watchy-bits-the-skin-diver/

Etiquetas:

7 comentarios en «Los Skin Divers»

  1. Mario Marenostrum

    Completo artículo que pone en valor marcas respetedisimas internacionalmente como Squale y que en España apenas son conocidas. Saca a la luz marcas y modelos de cuando cuando se hacían relojes para profundidades “lógicas”. Con el PADI, los 5oo ó 1000m de sumergibilidad se nos ha ido de la mano el tema. Yo me pregunto ¿Cuanto aficionados al buceo deportivo suelen hacer inmersiones habituales a más de 100?… cero. Interesantísimo artículo, gracias.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.