@aviation_watch
Hoy me gustaría presentar el Invicta 1953 (Vintage Pro Diver 34334), que procederemos a sortear entre nuestros suscriptores el domingo 31 de enero.
El 1953 es un auténtico “hit” de la marca, de eso no hay duda y no me extraña, porque es un reloj muy bonito. Pero ¿es un buen reloj? Eso lo iremos viendo en detalle más abajo.
Veámoslo primero de todo.
La primera referencia del 1953 (la 31290) era monocromática, con el bisel negro. El lanzamiento del modelo a principios del 2000 se hizo con sigilo. Sin embargo, poco a poco, los foros de aficionados a los relojes se fueron haciendo eco de este reloj.
No hay duda de la semejanza que tiene la referencia inicial con el primer Rolex Submariner (el 6204) anunciado en 1953. Comparando ambos en la siguiente imagen vemos que su parecido es más que evidente.
Por ello, no tengo inconveniente en afirmar que el Invicta 1953 es un homenaje bastante descarado de este primer Submariner. Muchos aficionados también ven elementos del Tudor Black Bay 58 en su diseño, quizás porque es un reloj que hemos visto tanto en los últimos años. Pero la similitud con el Rolex Submariner 6204 es mucho más clara y el nombre elegido para este modelo, “1953”, delata la relación entre ambos relojes.
¿Por qué ha gustado tanto este reloj?
Creo que el Invicta 1953 es un reloj pensado para los entusiastas de los relojes, precisamente aquellos que frecuentemente son reacios a la marca, yo incluido, por sus diseños vulgares y la desquiciada política comercial que emplea. Tiene por costumbre anunciar unos PVP absurdos y ofrecer modelos a lo que aparentan ser suculentos descuentos. Esto es muy dañino para la marca, en mi opinión. Sobre esto ya escribimos en las reseñas Review Invicta Pro Diver 8926OB y Glycine Airman DC-4 (recordad que Glycine pertenece a Invicta desde el 2016).
Entre los elementos obvios que lo han hecho popular citaría su tamaño, unos perfectos 40 mm de diámetro, además de buenas proporciones generales.
El diseño aporta claros toques retro/vintage, tan de moda, como los dorados de la impresión, los marcadores y las agujas. Y por supuesto lleva lumen “envejecido”.
Críticamente, el Invicta 1953 ofrece 200 m de resistencia al agua, el doble que los SEIKO 5 con los que compite por precio.
Pero considero que Invicta ha ido mucho más allá. ¿Cómo, si no, se explica la desaparición de “elementos chirriantes” de otros modelos de la colección Pro Diver?
Un ejemplo de ello sería el logo alado, que desaparece en este modelo. En el 1953 sólo aparece el histórico nombre de la marca, retrayéndonos a la época dorada de Invicta, que recordemos fue fundada en 1837. Credenciales históricas no le faltan. También han desaparecido las alas en el contrapeso del segundero, que en este caso se asemeja a la utilizada en el Rolex 6204. Por último, también ha desaparecido el grabado de “INVICTA” del lateral de la caja afortunadamente, ya que no deja de ser un elemento de mal gusto (a mi parecer) y no veo otra manera de describirlo.
Definitivamente da la impresión de que Invicta ha escuchado lo que han ido comentando los aficionados a los relojes y con este modelo ha corregido elementos muy criticados hasta ahora en su colección.
Dado el éxito de la referencia inicial y el gran entusiasmo generado entre los aficionados, no debe sorprendernos que Invicta lanzase varios modelos adicionales para coincidir con la reciente campaña de Navidad.
Entre ellos se encuentra la referencia 34334 con el bisel “Coke”, que es el protagonista de esta reseña. Los otros modelos son la referencia 34333 (con bisel negro y azul), la 34335 (negro y verde) y la 34336 (negro y naranja).
Ahora paso a describir el reloj en detalle, lo bueno y lo malo.
El reloj viene presentado en un estuche amarillo, el color de la marca. Tiene unas dimensiones modestas (16 x 12 x10 cm), lo cual es de agradecer.
La caja exterior es de cartón grueso amarillo con el logo en relieve en la tapa.
El estuche interior también es amarillo, hecho de un material plástico, con el nombre de la marca en relieve de color plata en el frente. Está forrado de un material sintético, de un color amarillo más apagado que el empleado en la parte externa. En el cojín del reloj se aprecia bien que es un tejido tipo microfibra, pero muy fino. El acabado interior del estuche es bastante pobre, con malos encuentros y la tela en el interior de la tapa, por ejemplo, está manchada además de mal cortada y pegada.
Dentro de la caja, el reloj está muy bien sujeto además de protegido por numerosos plásticos. En la tapa hay una pequeña sección donde está la documentación, incluyendo la tarjeta de registro para extender la garantía un año (hasta tres en total) y un escueto manual de instrucciones. También se incluye una gamuza de limpieza.
La presentación del reloj es de calidad media, aunque los materiales empleados son mejorables al igual que lo es el control de calidad. Dicho esto, está bastante bien dado el precio del reloj y desde luego si lo comparamos con las cajas que suele emplear SEIKO para sus relojes de gama medio-baja.
Una vez sacado del estuche, extraído los plásticos y ajustado el tamaño del brazalete, podemos apreciar los detalles de la caja del reloj.
Realizada en acero inoxidable, mide 40 mm de diámetro por 14,5 mm de grosor. El reloj es un poco grueso y cabezón. Las asas tienen una caída bastante pronunciada en su parte inferior, muy observable desde los lados del reloj. De no ser por la protuberancia de la trasera vista, que quizás añade 1,5-2 mm de grosor al reloj, este tendría un perfil absolutamente perfecto para ser ultra cómodo. Su longitud (“lug-to-lug”) es de 49 mm, una dimensión que considero más o menos el límite para que luzca bien en muñecas más pequeñas.
El acabado de los laterales es cepillado, al igual que lo es el de la parte superior de la caja. El cepillado de los laterales es fino, resultando en bonitas superficies de aspecto ligeramente satinado. Sin embargo, el cepillado de la parte superior, con patrón radial, es inexplicablemente basto. Mi impresión personal es que este último elemento, que es el que más vemos, es demasiado, digamos… industrial. Igual de inexplicable, pero desde luego bienvenido, son los facetados pulidos en los encuentros entre la parte superior y los laterales de la caja, además de estar muy bien acabados.
El bisel unidireccional de 120 clicks tiene una buena altura. Sus lados tienen un grueso estriado para facilitar el agarre. Dicho esto, la manipulación del bisel es mejorable.
Es sonoro, pero el tono de los clicks es tosco y no transmite gran calidad. Se observa cierta holgura entre posiciones, aunque es bastante escasa. Lo que más me ha chocado es que la resistencia no es constante durante el giro, indicando quizás que la junta del bisel no está perfectamente colocada, o engrasada.
En este caso, el insert está perfectamente alineado con la impresión en la esfera, aunque leo en foros y otras reseñas que falla con frecuencia. El insert es del tipo “Coke”, negro en la parte superior y rojo en la inferior, fabricado de aluminio. La impresión es precisa y emula el bisel del Rolex 6204. Quizás algunos echen en falta marcadores más frecuentes hasta los 15 minutos, pero no es mi caso. La forma convexa del insert transmite la impresión de que el reloj sea más fino de lo que es en realidad.
La corona está firmada y es roscada. A imagen y semejanza del reloj que homenajea, no lleva guarda coronas y es de un tamaño considerable. Tiene un acabado estriado, facilitando su manipulación. Considero el mecanizado de la rosca mejorable, sobre todo a la hora de enroscar, pero tampoco es un tema muy grave si el reloj va a emplearse regularmente, ya que se cargará sobre la marcha. En uso, al extraer la corona se nota la posición fantasma por la ausencia de fechador en la esfera.
El cristal mineral biselado sobresale ligeramente por encima del insert del bisel. El cristal es plano y lleva un buen tratamiento antirreflejos, por lo que no hay distorsiones al leer la hora y se observan escasos reflejos, ayudando mucho la legibilidad (y hacerle fotos).
La esfera de este reloj es su aspecto más destacable, a mi ver. Me gusta mucho, mucho. Mantiene la simple y elegante presentación del reloj homenajeado. Evidentemente los acabados no están a la misma altura, pero vemos un dial nítido, bien ejecutado y en mi opinión muy atractivo.
Los marcadores son impresos, con el lumen ligeramente envejecido enmarcado por bordes dorados. Los marcadores de las 3-6-9 h son del tipo bastón y el de las doce un triángulo invertido. Las otras horas presentan marcadores en forma de círculo. Los índices de los minutos se presentan en un anillo exterior y están impresos en color dorado.
El anillo de fijación del cristal (“chapter ring”) es vertical y tiene un acabado plateado cepillado, a juego con la caja.
Las impresiones de marca son escasas. Vemos un “INVICTA” a las 12 h en letras doradas de un tamaño algo grande, pero sin excederse. A las 6 h vemos un discreto “1953” en dorado y “AUTOMATIC” en rojo en una segunda línea de texto.
La ausencia del fechador proporciona una perfecta simetría al dial.
Las agujas emulan las del reloj homenajeado, con material luminiscente enmarcado en dorados pulidos. La terminación tipo piruleta del segundero pulido, sin lumen, es muy visible. En general, las agujas son bastante finas para los cánones contemporáneos, pero tienen proporciones perfectas para el reloj y no dificultan la legibilidad, que considero muy buena.
El material luminiscente empleado es Tritnite de color verde. No revelo ningún secreto al afirmar que es un material que genera un resplandor duradero pero muy tenue. El 1953 no es una excepción a este aspecto de la marca que es comúnmente criticado. La siguiente imagen (como notaréis por el barrido del segundero) ha requerido una larga exposición para poder ver el lumen, además de tener que aumentar considerablemente el contraste de la imagen en el proceso de edición de la misma.
La trasera atornillada es de exhibición con cristal mineral. Muestra las características básicas del reloj en un anillo periférico que rodea el cristal. El fondo visto muestra el calibre NH35 de SEIKO con un rotor personalizado de color amarillo con la firma del fabricante. Más allá del rotor, el calibre no es exactamente un rompecorazones. Fiable y probado, desde luego sí lo es, pero no es un movimiento para exhibir. Por ello, la elección de la trasera vista no la acabo de entender. Añade altura por la necesidad de proporcionar espacio para fijar el cristal, estropeando el bello perfil (y la gran comodidad) que tendría en su ausencia. Además, en mi opinión, no considero las traseras vistas apropiadas en un diver que se precie.
Sobre el calibre NH35A de SEIKO hay poco nuevo que decir, siendo un calibre muy común empleado por el gigante nipón (bajo la denominación 4R35) y muchos otros fabricantes. De todos modos, repito sus características para que no las tengáis que buscar. Esta unidad en concreto está ensamblada en Malasia. Es un calibre automático de carga bidireccional. Oscila a 21.600 vph (3 Hz), cuenta con 24 rubíes y ofrece 41 horas de reserva de marcha. A priori, la precisión del calibre es de -20 a +40 segundos por día, es decir nada excepcional, aunque en mi experiencia es posible regularlos mucho mejor y con este ejemplar es el caso. El calibre de esta pieza rinde entre +1 y +14 segundos por día en las cinco posiciones que he testeado en el timegrapher. Invicta lo describe como un “calibre automático preciso” y considero que es una descripción justa.
El reloj viene de serie con un brazalete tipo Oyster de 20 mm de ancho en la caja y 18 mm en el cierre.
Es un componente donde el ahorro en costes es bastante palpable.
Afortunadamente es cómodo. Los encuentros con la caja son del tipo chapa, pero el primer eslabón está totalmente articulado por lo que permite una buena caída del brazalete, ajustándose bien a la muñeca.
El cierre es estampado, con pestaña adicional de seguridad. Ambos se sueltan a presión. Considero que la pestaña de seguridad está excesivamente prieta, requiriendo muy buenas uñas para abrirla, llegando a ser muy incómodo hacerlo. El brazalete no cuenta con extensión de buceo, pero no se echa en falta, ya que el 1953 es más bien un “desk” diver que un reloj para alcanzar las profundidades.
El acabado de los eslabones es relativamente bueno y uniforme, aunque sorprende bastante que el satinado sea notablemente más brillante que el del reloj. Sólo los lados de los eslabones tienen un cepillado a juego con los laterales de la caja.
En resumen, hay brazaletes bastante mejores, sin duda.
De todos modos, creo que el 1953 es un reloj al que le sentarán bien multitud de correas, desde cauchos tipo Tropic o Waffle a cualquiera correa de piel tipo vintage, por lo que el brazalete es reemplazable y quitarlo es fácil por el acceso a los pasadores desde la parte inferior de los terminales de chapa.
El reloj ofrece 200 m de resistencia al agua, aunque no cuenta con certificación por lo que técnicamente no es un “DIVER”. Queda claro, sin embargo, que debería resistir perfectamente el baño en piscina y mar o realizar deportes acuáticos y snorkel.
Queda enseñarlo puesto, en este caso en mi muñeca (bastante plana) de 17,5 cm de circunferencia. Mi impresión es que es un reloj que luce mucho, desde luego bastante más de lo que cuesta.
Por los €145 que me costó (en la UE, directamente del fabricante) no se puede pedir mucho más.
Es un precio muy atractivo, aunque a la vez limitado, requiriendo la toma de ciertos atajos a la hora de producir el reloj que hemos ido viendo en esta entrada.
Considero que el Invicta 1953, en conjunto, es un reloj muy recomendable. Sí, es mejorable, pero ofrece una magnífica relación calidad-precio, además de ser un gran reloj mecánico para ir adentrándose en esta afición.
Para concluir, admito que tengo muchas dudas sobre la decisión de sortear este reloj. He meditado mucho quedármelo y seguramente acabaré comprándolo otra vez. Confío esto transmita cuánto me ha gustado.
Os muestro una última imagen del reloj cerca del mar, donde se podrá meter sin problema cuando la meteorología acompañe.
Sorteo
Ahora llega la parte buena.
El domingo 31 de diciembre a las 21:00 (en Mallorca) sortearemos el reloj objeto de esta reseña entre los suscriptores a safonagastrocrono.club.
Los gastos de envío, a cualquier destino, correrán de nuestra cuenta.
Si no sois suscriptores todavía y queréis participar en el sorteo, por favor rellenad el siguiente formulario o el que encontraréis en la página de inicio. Protegemos vuestros datos según la normativa GDPR de la UE. Cada notificación de una nueva entrada a través de email os ofrecerá la oportunidad de daros de baja.
¡Suerte a todos!
Leyendo la reseña y viendo varios comentarios de compañeros, todos llegamos a la misma conclusion, si no nos toca en el sorteo, lo compramos
Parece ser de los relojes asequibles de los que llaman la atencion
Este, por ahora, está agotado. Queda el verde/negro y el naranja/negro, ahora a €120.
Nicely written! As the owner of the first iteration I tend to agree with you. It’s a great starter watch and also fits in any enthusiast’s collection. Awaiting my Coke edition today and eager to compare the two watches along with one of the first Pro Divers Invicta released early in the millennium. This is a good start for Invicta but still a ways to go to regain the prestige they so desperately seek.
Thanks Arthur. As I’ve told you, and others, this watch grabbed my attention after you first cited it. It would be nice to think that its huge success will indeed trigger a change of direction for the brand, and that it might over time be remembered as the watch that did precisely that. It would make it pretty valuable, I think. Since I’m giving this one away, I have gone and grabbed a “Batman” version, of which very few are available. The green and orange seem the less popular ones. The Europe store, by the way, has the all-black back in stock. Anyway, it’s due next month… My plan is to keep it all wrapped up in a box hoping for appreciation. Then I’ll wear it. ?