Reseña SEIKO SPB143

@jorgeju

Prometí que si este reloj al final llegaba a mis manos escribiría una pequeña review del mismo, así que aquí la tenéis. 

Antes quisiera comentar que esta es la primera vez que me aventuro a escribir mis impresiones sobre un reloj, pero qué mejor forma para empezar que con este maravilloso producto de SEIKO. Pero no avancemos acontecimientos, la conclusión la deberé escribir al final. Así que olvidemos lo que acabamos de leer; lo de maravilloso, primero se lo debe ganar…

Pero quizás antes de presentar el reloj y sólo a modo de introducción debería comentar lo siguiente: en un tiempo muy lejano y en un lugar muy remoto llamado la tierra del sol naciente, la compañía SEIKO anunció su primer reloj de buceo, el 6217-8000/8001, más conocido como el 62 MAS.

De eso han pasado 55 años… Como ya son muchos años y sin más preámbulos, lo que ahora nos interesa es presentar el reloj protagonista de hoy, que en este caso es la reinterpretación moderna más reciente de este clásico.

Sabemos que SEIKO ya ha sacado unas cuantas de estas reinterpretaciones, de las que alguna que otra ha pasado por mis manos (SBDC051 y SPB053), pero ésta en concreto es la que más interés me ha suscitado y de la que más y mejor amor a primera vista he sentido.

En este caso, la unidad que he adquirido y que vamos a presentar es de la nueva gama SEIKO PROSPEX Diver’s Watch 1965 Diver’s Modern Re-interpretation. Esta gama intermedia está compuesta por cuatro unidades. La de la presente review es el SPB143J1, con brazalete metálico y dial gris. La referencia SPB145 es la versión japonesa “Special Boutique Edition”, aunque grandes distribuidores de la marca lo han vendido fuera de Japón. La referencia SPB147J1 lleva dial marrón/bronce y se presenta con caucho. Finalmente, la referencia SPB149J1 se corresponde a la serie limitada “55th Anniversary” con dial azul.

El reloj lo podemos observar en más detalle en la siguiente imagen.

El primer contacto con el reloj es su presentación y caja, que impresiona, pero lamentablemente para mal. Llega con una simple caja negra de cartón con ningún tipo de aderezo que correspondería a la categoría del reloj que estamos comprando. Supongo que esto viene así por la distribuidora que tenemos en España. No quisiera comentar mucho más, pero en esta gama de precios en la que nos movemos parece que la marca y/o el distribuidor desee primar más el beneficio en sí que la fidelidad del cliente con un producto 100% redondo e impactante.

Repitiéndome, en este aspecto estoy muy desilusionado porque esperaba una caja tipo la de la reinterpretación SPB51, que os muestro a continuación.

En este caso, nos recuerda la presentación de otros divers de gama baja-media de SEIKO. Espero y deseo que el empaquetado tendrá una excepción en la versión boutique SPB145 y/o la limitada SPB149, pero no he podido verlas personalmente.

El desencanto de la caja (que no es la primera vez que me pasa con un producto SEIKO) se queda totalmente en un segundo plano cuando la abres y te encuentras de lleno con el reloj observándote, diciéndote aquí estoy, soy tuyo, te voy a gustar y nunca me vas a abandonar.

Destaca a primera vista su tamaño, relativamente comedido. Para quien este habituado a los modernos divers de SEIKO, este modelo se ve menos contundente, no tan ostentoso y sí mucho más estilizado y suave de líneas. Si no te das cuenta de su corona a las 3 h, dirías que merece el apodo de Baby Marinemaster a los llamados Baby MM 200. A fin de cuentas, el tamaño del bisel respecto al dial le da esa sensación de ser un pequeño Marinemaster.

Pero sólo es una impresión, porque el reloj tiene una estructura totalmente nueva y destaca su reducido tamaño de 40,5 mm, que me parece una excelente opción para los que tenemos una muñeca más pequeña. Esta bajada de tamaño también ha estado presente en su perfil, de tan solo 13,2 mm, y que hace verlo mucho más estilizado que el resto de divers de SEIKO. Con todo ello nos vamos a una medida de lug-to-lug de 47,6 mm.

Lo dicho, para muñecas de un tamaño comedido el bajar de los temidos 50 mm de asa a asa es un gran extra y en mi opinión una gran motivación para adquirirlo.

Como va siendo normal a partir de las gamas intermedias, SEIKO incorpora su tratamiento de Diashield (revestimiento super duro del metal), que le otorga un extra de protección ante los temidos roces para evitar posibles marcas. Con este tratamiento el acero adquiere un ligero color oscurecido, un toque de color más tirando a titanio.

Esta reinterpretación del 62 MAS también cuenta con nuevas proporciones: la caja tiene un formato recto y simple con unas asas bastante cortas. Si prestamos detenidamente atención a los detalles de la misma, en los laterales tiene un micro cepillado bastante suavizado y al juntar las diferentes alturas y partes del reloj, jugando con las aristas, termina con un formato lineal pulido. Otorga mucha más profundidad y percepción de calidad. Supongo que esta calidad de los detalles será superior al original.

Es destacable que la corona es atornillada pero no tiene ningún tipo de protección, solo la unión de aristas que se redondean ligeramente en la posición de las 3 h. Esta posición de la corona es fiel a la reinterpretación y para los fanáticos de la marca es una posición algo extraña. Pero se lo vamos a perdonar porque el tamaño de la corona es modesto y no molesta para nada en la muñeca.

Quisiera indicar que le quita un poco de presencia que la corona no esté firmada. Como opinión personal, en este punto me hubiera gustado que se asemejará más al original, o al modelo SLA, y que se hubiera añadido la palabra SEIKO como firma en la corona, o en su defecto la S como tiene cualquier Sumo.

Tenía muchas ganas de tener el reloj en la mano por la “polémica” que tuvo en su presentación el insert del bisel. Es de acero, que no tiene por qué ser malo y preocuparnos por no llevar uno de los “tan de moda” cerámicos. Simplemente, SEIKO ha optado por este formato que también es bastante resistente, e imagino será por tanto una pieza reemplazable. Eso sí, el insert destaca muchísimo ya que su acero ha sido cepillado radialmente, detalle que le proporciona más profundidad. Dicho esto, sólo tiene Lumibrite en la perla situada en los 60 minutos.

El bisel del reloj es bastante estrecho y gracias al formato de las aristas de la caja, destaca por su suavidad a la par de ofrecer mucha sensación de fuerza en su giro típico de 120 clics.

Observando de cerca el reloj, vemos que su cristal de zafiro esta ligeramente abovedado, sobresaliendo por encima del bisel, lo que le da un aspecto de reloj actual y vintage a la vez.

Una vez nos asomamos bajo del cristal, nos encontramos con un diseño general casi igual e idéntico al reloj al que reinterpreta. Los índices aplicados son rectangulares, a excepción del de las 12 h que tiene un formato doble.

Las agujas del reloj son en formato bastón, muy fieles al original.

La carga de Lumibrite tanto de las agujas como de los índices, los cuales se ven “engordados” por su cantidad de lumen, es ni más ni menos a lo que nos tiene acostumbrados SEIKO. Dura y dura toda la noche sin despeinarse y está dotado de su característico color verde.

Respecto al dial del reloj, en todos los modelos tiene una textura soleil (rayos solares). En el SPB143J1 tiene un color gris pizarra que resulta muy camaleónico por este efecto texturizado de rayos de sol. Si no tiene incidencia del sol o una luz, el color se apaga hasta un sobrio, pero nada aburrido, gris oscuro casi negro. Y cuando recibe una iluminación nos brinda una serie de diferentes matices de gris, hasta conseguir uno brillante y elegante.

En la posición de las 3 h, como es habitual en los relojes de SEIKO, tenemos la ventana del datario con la forma idéntica al índice de las 9 h. El disco del fechador del día del mes con fondo de color blanco hace muy simétrica y visualmente perfecta su inserción en el dial.

Esta versión del 62 MAS viene con armis metálico. El brazalete en este modelo curiosamente tiene los eslabones más pequeños que en otros modelos con un diseño semejante al Baby Marinemaster 200 o el 62 MAS anterior, el de 43 mm.

Con ello se consigue un ajuste casi perfecto a pesar de llevar la extensión de buceo. Ésta, no encuentro que moleste lo más mínimo ya que su tamaño es mínimo, aportando sólo un ligero grosor extra, y su sistema sigue siendo el mismo que los relojes anteriormente mencionados. Eso sí, para mi uso del reloj, este extensor personalmente sobra y más siendo su accionamiento nada fácil ni intuitivo. Siempre he necesitado ambas manos para manipularlo,

El cierre sigue siendo el típico cierre triple con el botón de liberación, cierre y extensor. Pero sí encontramos algunos cambios estéticos en el cierre, ya que este pasa de estar firmado en relieve profundo a ser estampado o laser (no me queda claro). Esto le da un aspecto bastante más moderno. Si alguna vez toca pulirlo, no sé muy bien la profundidad que tendrá y por lo tanto si se podrá hacer con normalidad sin que desaparezca el estampado de la marca SEIKO. Pero pensándolo bien, no todo el mundo puede pulir un reloj con tratamiento Diashield, así que no lo sabremos fácilmente. Volviendo a los cambios estéticos, y aquí ya va por gustos, si tienes muchos SEIKO se agradece tener algo diferente, y como este reloj tiene una carruja totalmente nueva, creo que este cambio es aceptable, incluso bienvenido. En la imagen inferior observamos la diferencia: a la izquierda vemos el cierre del SBDC079 y a la derecha el del SPB143J1.

Para finalizar hablaré de su calibre, el movimiento automático 6R35, la evolución del 6R15. Ha aumentado su reserva de marcha hasta las 70 horas y su latido es de 21.600 vph. Poco más a destacar sobre el movimiento, que es el nuevo estándar de SEIKO en esta gama. Me gustaría comentar que mi unidad, para mi uso y disfrute, está bastante bien ajustada ya que en unas 30 horas se ha adelantado 5,6 segundos.

Como conclusión, hay que decir que este reloj ha venido para reemplazar mis dos 62 MAS anteriores (el SPB051 y el SPB053). Con sus 43 mm se me hacían considerablemente grandes.

El SPB143J1, en la muñeca, queda justo de tamaño, muy proporcionado y sobre todo muy elegante. No es para nada incómodo y está muy bien conseguido para el día a día, con un centro de gravedad bajo por lo que no cabecea para nada. Su armis se ajusta de una manera casi perfecta, de tal modo que llega a dar la sensación de no llevar nada. El color gris le hace ser muy sobrio, pero conforme le pega la luz, el dial y el bisel hacen su juego y parece un reloj diferente por completo. Tiene muchos matices diferentes y por tanto te llevas varios relojes en uno.

Me parece un reloj más que correcto y creo se quedará en mi caja, junto con los relojes con etiqueta de “no vendibles” y aquí sólo entran los que califico como maravillosos, que para mi gusto este SEIKO SPB143J1 lo es.

Falta rematar esta primera presentación que escribo (que espero sea la primera de muchas más) con la idea de que, una vez más, SEIKO da más por menos, aun contando con la considerable subida que están aplicando en los precios. Pero si nos centramos en su comodidad, su estilo retro y su calidad, pues representa un conjunto redondo y el precio pasa a un segundo plano, ya que sólo te para en retrasar un poco más su adquisición.

Eso sí, como cazador que siempre busca cazar nuevas presas, siempre me quedará clavada la espina de saber cómo será la versión SLA…