Con motivo del 50º aniversario del Royal Oak, Audemars Piguet ha anunciado el lanzamiento de numerosas nuevas referencias del legendario diseño de Gerald Genta. Recientemente, he tenido la oportunidad de ver siete de estos nuevos modelos en vivo. En mi opinión, la guinda del pastel es la referencia 26240OR, el cronógrafo realizado de oro rosa con el nuevo tono de esfera verde Khaki. En la entrada de hoy vamos a verlo en más detalle.
El RZE Endeavour vuelve a estar disponible con una selección completamente nueva de combinaciones de colores. El popular diver de titanio, lanzado originalmente el verano pasado, se ve revitalizado en los modelos Medallion Yellow, Azure Blue, Hunter Green y Rescue Orange (el que presentamos en el artículo de hoy). Más allá de la esfera, poco ha cambiado. Y eso es algo bueno.
Hoy vamos a ver el North Pole de la marca germana Davosa. Es una edición limitada a 500 unidades, fruto de una colaboración con el diseñador eslovaco Mario Gašpar.
La firma Steinhart ya lleva más de 20 años en el negocio y es siempre una interesante fuente de debate entre los aficionados. Es un debate sobre el que reflexionaremos en esta entrada.
Con el advenimiento de la toma de posesión del Imperio por parte de Catalina la Grande, Rusia entró en un periodo de modernización burocrática y tecnológica que hizo totalmente necesario la implementación de una industria horológica, antes inexistente en el país.
El protagonista de nuestra entrada es buen ejemplo del trabajo realizado en aquella época, cuando floreció una incipiente industria relojera fruto de las nuevas ideas de progreso y desarrollo.
Mostrar la hora es la función básica de todo reloj, su “raison d’être”.
Por ello, puede sorprender que la “hora” merezca una entrada en una serie de artículos dedicada a las complicaciones, ya que no añade nada en términos de funcionalidad. Pero, el modo de presentar la hora en sí tambíen puede representar una complicación, aunque su impacto sea meramente estético.
En este primer capítulo (de tres) intentaré sentar las bases de este tipo de “complicaciones”.
Hace más de un millón de años, al norte del Círculo Polar Ártico, la esfera de este reloj golpeó la Tierra. El meteorito Muonionalusta se descubrió por primera vez al oeste de la frontera entre Suecia y Finlandia en 1906, cerca del pueblo de Kitkiöjärvi. Se cree que tiene más de 4.500 millones de años, siendo uno de los meteoritos más antiguos que se conocen que han golpeado el planeta. Ha sido testigo del ascenso y la caída de cuatro Edades de Hielo.