@invitado
Nota del editor:
Este artículo está escrito por @mpbene6110 (Michael). Apareció por primera vez en su blog michaelswatchblog.de el 17/09/2020. Reproducimos, con permiso, una versión traducida, editada y ampliada para poder alcanzar el público de lengua española.
En esta entrada mi intención es mostraros un reloj del que probablemente la mayoría de vosotros no hayáis oído hablar nunca: el Wolbrook Skindiver Automatic.
Veámoslo…
Primero de todo quiero dejar claro que no soy un gran fanático de las micro marcas. Además, tampoco soy un gran fan de la plataforma Kickstarter. Entonces, ¿por qué pedí un reloj de una micro marca a través de Kickstarter?
Pues hay varios motivos que voy a ir compartiendo con vosotros.
En primer lugar, destacaría el diseño del reloj. Un calibre manufactura u otros elementos del reloj, como un bisel cerámico, un cristal o una caja, también pueden resultar llamativos. Pero por lo general soy un hombre de gustos sencillos. El reloj debe entrame por los ojos, me tiene que gustar. Punto. Y este reloj obtuvo 99 sobre 100 puntos a primera vista.
El diseño del Wolbrook Skindiver es genuinamente de los años sesenta. Cada uno de sus elementos transmite “sensaciones” o “vibraciones” vintage, desde la llamativa aguja de flecha hasta el zafiro abovedado.
Incluso el movimiento se podría considerar vintage… En el interior del reloj encontramos el calibre automático Miyota 8215, sin parada de segundero, pero con remonte manual y ajuste rápido de fecha. Un todo terreno sin refinamiento moderno alguno. Suena como si en el interior del reloj hubiese una serpiente de cascabel y nadie en su sano juicio elegiría este calibre por su precisión. Miyota promete un rendimiento de -20/+40 segundos/día.
Dicho esto, Wolbrook prometió ajustar el movimiento para que rindiese entre ±15 segundos/día y la marca ha cumplido, ya que mi pieza tiene una precisión en uso de +6 segundos/día.
Otro cambio que Wolbrook ha incorporado al calibre es el reemplazo del anillo de la fecha. Wolbrook ha optado por presentar los números impares en negro y los números pares en rojo, ambos impresos en una fuente realmente añeja, con regusto vintage. Esto se conoce como fecha de ruleta y en mi opinión es un gran detalle, añadiendo un elemento retro más.
Y no nos olvidemos de la trasera, con ese grabado del módulo lunar “Eagle“. Imagino que llevaréis desde el título de esta entrada preguntándoos sobre la relación entre un “diver” y la Luna. Y para rematarlo lleva un emblema espacial en su fondo ciego. No os impacientéis, en breve os explicaré el motivo.
En segundo lugar, también destacaría el “poso”, el legado del modelo. Echemos un vistazo a la historia del reloj y de la marca. Para mi suele ser una consideración bastante importante a la hora de decidirme por un reloj y es raro que adquiera una pieza sin historia. Si sois lectores asiduos de mis artículos esto ya lo tendréis bien claro…
Wolbrook fue fundada en 1949, junto a una segunda marca denominada “Douglas”. En aquel entonces no era inusual ver relojes prácticamente idénticos con estampas de distintas marcas en la esfera, incluso del mismo grupo relojero como en este caso.
De todos modos, es posible que nunca hayáis oído hablar antes de estos dos nombres y yo, hasta toparme con la campaña en Kickstarter, tampoco, la verdad sea dicha. Jamás obtuvo gran éxito como empresa relojera y desapareció 25 años después de su fundación durante la crisis del cuarzo, como tantas otras.
Sin embargo, curiosamente en los años 60 y 70 su Skindiver “Worldtimer” tuvo cierto éxito comercial. Era un reloj asequible, que se vendía por solo $20 en 1974, como se puede observar en el anuncio que muestro a continuación. Esta cifra representa $117 en términos corrientes, es decir actualizado por la inflación. Para ponerlo en perspectiva, un Rolex Submariner costaba unos $230 en la época.
Según citó Wolbrook en la campaña de Kickstarter:
“El Skindiver “Worldtimer” de los años 60 era un reloj sólido, resistente al agua y altamente legible con marcadores y agujas luminosos, un segundero de gran tamaño, agujas distintivas de la hora y los minutos, zona horaria, tiempo transcurrido e indicadores de 24 horas. Esta combinación de características de un reloj de buceo y un reloj de piloto lo convirtieron en el tipo de reloj herramienta que “un ingeniero de la NASA y un piloto de pruebas” elegiría y usaría personalmente.”
Y vaya casualidad, el reloj lo llevó un personaje muy, pero que muy distinguido: Neil Armstrong, el futuro primer hombre en pisar la Luna. Armstrong de hecho llevaba un Douglas Skindiver, un reloj que cedió a su hermano Dean Armstrong y que se subastó el año pasado. Lo podéis ver a continuación y la proveniencia la encontraréis en el enlace.
En vista del diseño y la historia que aportaba este reloj decidí respaldar la campaña de la reedición del Wolbrook Skindiver en Kickstarter, una campaña que no me decepcionó. Hablo por experiencia, ya que he apoyado 12 a lo largo de los años, aunque no todas ellas de relojes. Considero esta campaña como la más profesional en la que he participado. Por supuesto que hubo retrasos, pero con el Covid-19 de fondo trastornando todas las cadenas de suministro, creo que la nueva empresa francesa, fundada específicamente para este lanzamiento, hizo un trabajo excelente. ¡Chapeau!
Elegí la versión del reloj que era más fiel al diseño original del Wolbrook. En la campaña se ofrecieron numerosas variantes de esfera, bisel, caja (incluida una versión PVD), trasera, cristal y calibre (con “upgrade” al Miyota 8315 o “downgrade” al calibre SEIKO VH31 Mecaquartz, con barrido de segundero pero sin fechador). Pero en mi opinión, muchas de estas opciones carecían del toque retro que me atraía.
Todas las versiones comparten características básicas, es decir:
1. Caja de acero inoxidable 316L de 40 mm de diámetro, 48 mm de asa a asa (“lug-to-lug), 13 mm de grosor y 20 mm entre asas.
2. Cristal de zafiro con abovedado doble y magnificador como opción base. Una de las versiones ofrecía un “upgrade” a un cristal de hesalita.
3. Super-LumiNova en marcadores y agujas.
4. Bisel es unidireccional de 60 clicks.
5. El calibre Miyota 8215, con 40 horas de reserva de marcha. Opcionalmente el Miyota 8315 (con parada de segundero y 60 horas de reserva de marcha) o con calibre de cuarzo.
6. Relojes montados y regulados íntegramente en Francia.
El reloj llegó con una correa de piel que quité nada más estuvo en mis manos. No es mala correa, pero para mí estaba claro desde el principio que este reloj se vería mejor con una correa de estilo Tropic vintage. Encontré una con un patrón típico Tropic y agujeros estilo Rallye. Creo que la combinación hace una pareja perfecta.
Os muestro más detalles del reloj y sus acabados en el siguiente carrusel de imágenes.
Y cómo no, hay que verlo puesto. Como podréis imaginar, sus dimensiones lo hacen apto para todo tipo de muñecas.
Asumiendo que por desgracia os perdisteis la campaña, pero queréis este reloj, aun lo tenéis fácil. No hay más que visitar el sitio de web de la marca. Los precios son más altos que durante la campaña, de hecho este modelo en concreto tiene un precio actual de €419 (€439 con calibre Miyota 8315 y a partir de €199 equipado con calibre de cuarzo). Si os soy sincero, no me parece una ganga. Sin embargo, sí que me parece una cifra razonable teniendo en cuenta el diseño único del reloj, la sólida calidad de sus componentes, los acabados y la interesante historia tras él.
Muchas gracias por la presentación, una magnífica reedición de un sencillo y muy bonito skindiver. A un precio contenido (el mecaquartz), pero en la versión automática no lo considero suficientemente atractiva comparado con otros similares, bien de otras micromarcas o bien en concepto como el DH1970. Aunque estso últimos no sean reediciones en sentido estricto. De todos modos seguiré con atención esta marca y estos modelos.