@robertoflores
Nota del editor: Roberto, el autor de este artículo, es un compañero de afición afincado en México. Esta entrada toma inspiración de contenido publicado por primera vez en el foro relojesrelojes.com.
Llevaba un tiempo tras un Flieger, pero lo quería alemán. Esta es la historia de como descubrí Dekla, una joven marca germana que ofrece una limitada colección de relojes, principalmente de inspiración militar, aunque altamente personalizables. Y cómo no, del Type A que adquirí de la misma.
Veámoslo…
Cuando hablamos de relojes tipo Flieger, inmediatamente pensamos en IWC, Laco, Stowa, Wempe o incluso A. Lange und Söhne, los productores originales de los B-Uhr de la Luftwaffe.
Sabemos que el valor de esos relojes originales es estratosférico. Pero las reinterpretaciones modernas de algunas de estas marcas tampoco son especialmente asequibles. Un buen ejemplo de ello sería el Stowa de bronce que ya tuvo ocasión de reseñar el compañero @aviation_watch. Laco, sí que ofrece una gama de Fliegers “básicos” equipados con calibres de Miyota, pero esto no es lo que buscaba. Sinceramente, hay opciones desde China o de micro marcas bastante más accesibles en términos de coste.
Así que me puse a investigar…
Una marca que apareció durante este proceso fue Dekla, que describiré en más detalle en el siguiente apartado. Me topé con una serie de reseñas que, por lo general, eran muy positivas.
Una de ellas fue la de @mpbene6110 (Michael), un colaborador esporádico en este mismo sitio web: Dekla Baumuster B: The Inhouse Choice.
Pero hay muchas más, e insisto, su tono era generalmente muy positivo.
A modo de resumen, de mi investigación concluí que Dekla ofrecía relojes elaborados en Alemania, con la mayoría de los componentes fabricados “in-house” salvo los cristales, las correas y los calibres. Además, la marca ofrecía sus relojes a precios muy atractivos dadas sus especificaciones y permitía la personalización de los mismos hasta un nivel impensable.
Dekla
La marca con base en Stuttgart fue fundada en el año 2015, de ahí que la describiera al principio como “joven”.
Su intención inicial era producir 200 relojes basándose en componentes de terceros. Sin embargo, la marca relata que la calidad de las cajas que recibió de su suministrador dejaba mucho que desear. Así que decidió adquirir una máquina de mecanizado CNC para producirlas por sí misma. Originalmente estas cajas de producción propia se vendieron a terceros. De hecho, Dekla sigue produciendo cajas para otras marcas. pero muy pronto retomó el tema de la producción de relojes.
Hoy en día, ya es un fabricante de relojes alemán experimentado, muy enfocado en las necesidades y demandas del cliente. Como resultado vemos “relojes alemanes” de alta calidad ofrecidos a precios muy razonables, lo que a menudo ha sido la “raison d’être” de la industria relojera germana.
Llevó varios años consolidarse como un productor integrado y eficiente, pero hoy en día Dekla se enorgullece de ofrecer relojes con componentes propios de altísima calidad. Entre ellos se incluyen las cajas, los diales y las agujas.
Por ejemplo, es la propia marca la que trata térmicamente, pule y añade el material luminiscente a esta últimas. Los acabados de sus cajas son especialmente destacables, especialmente tras el lanzamiento en el año 2020 del acabado “6Steel“, un proceso patentado para endurecerlas.
Tras el mecanizado del acero inoxidable 316L, las cajas se calientan en una mezcla de gases de carbono a la temperatura ideal para permitir la difusión de átomos de carbono sobre la superficie de las mismas. Este intrincado y lento proceso se repite varias veces para aumentar la concentración de carbono. El resultado es una acumulación de 30 micras con una dureza de 1300 Hv en la escala Vickers (es decir, seis veces la dureza original del acero inoxidable normal).
Por si no fuera bastante, una vez que las cajas han sido endurecidas, pasan por una cámara de vacío para recibir un recubrimiento de plasma y así elevar la resistencia a la corrosión, aumentando especialmente su capacidad de resistir el agua de mar y al sudor.
El resultado lo podéis ver a continuación.
Dekla ofrece en la actualidad siete líneas de relojes.
Cuatro de ellas (Pilot, Tactical, Military Vintage y Military Vintage Cali) son de clara inspiración militar.
Además, Dekla ofrece un modelo Bauhaus y un “Deck Watch” de temática náutica. También contó con una edición limitada del cronógrafo “BlackJack Tu160”, aunque esta última línea de relojes ya está agotada.
Aunque puede parecer una gama limitada, las posibilidades de personalizar cada modelo (con la salvedad del “BlackJack Tu160”) supone que en realidad existen numerosísimas opciones disponibles. La personalización es especialmente significativa en su gama de relojes de piloto, como podéis ver a continuación.
Fuente: https://deklawatches.com/en/pilot/typea40
En el caso de los relojes de esta tipología, Dekla ofrece tres tamaños (40, 42 y 44 mm) y los dos formatos clásicos de dial tipo Flieger: el Type A o el Type B. Si queréis saber más sobre estos relojes os recomiendo consultar la entrada Relojes De Piloto: La Historia. También ofrece cajas de bronce (CuSn8) y un formato “Sport” en una caja de un estilo más contemporáneo.
Como se puede apreciar en las imágenes más arriba, Dekla permite seleccionar:
- Acabado de caja: cepillada a mano, arenada, pulida/cepillada (+€20 extra) o acabado “6Steel” (+€140).
- Bisel: cepillado a mano, arenado o pulido (+€15).
- Corona: tipo “diamante” o “cebolla” a la derecha o la izquierda, cepillada o arenada.
- Dial: lacado negro, azul con efecto rayos de sol (+€45) o tipo sandwich (+€74 o +€104 dependiendo del lumen base), en los tres casos con Super-LumiNova BGW9 u “Old Radium”.
- Agujas: azuladas, bronce (+€60), lacado negro u oro de 14 quilates (+€90), en los cuatros casos con Super-LumiNova BGW9 u “Old Radium”.
- Logotipo: en blanco u “Old Radium”, o sin él.
- Impresión personalizada en la esfera: en blanco u “Old Radium” (+€119).
- Calibre: manual (ETA 2801/Sellita SW210) o automático (ET 2824/Sellita SW200).
- Marcación FL 23883: a elección del cliente (+€35).
- Correa: negra o marrón.
- Cristal: AR en cara interna o en ambas (+€50).
- Trasera: fondo ciego o de exhibición con zafiro (+€60).
Dado este nivel de personalización, en realidad Dekla ofrece una de las gamas más amplias de relojes tipo Flieger del mercado.
La posibilidad de grabarlo con la marcación FL 23883 puede resultar algo contenciosa. Esta seña de identidad no pertenece a ninguna marca en concreto, meramente hace referencia a los Flieger históricos, que venían así marcados tanto en el reverso como el costado.
El código del Reichsluftfahrtministerium (Ministerio de la Fuerza Aérea del Reich Alemán) es de una especificación a la que estos relojes de Dekla no se atienen. “FL” (de Fliegnummer) proviene de su asociación con “equipos de aviación”; el “23” significa que es un “dispositivo de navegación”; finalmente, el “883” confirmaba que el reloj había sido testado por el instituto de investigación (Deutsche Versuchsanstalt für Luftfahrt).
El Reloj
En primer lugar, veamos la escena del “unboxing”, esa parte que tanto nos gratifica a todos los aficionados.
El reloj se presenta en una caja de madera muy bien acabada y de un tamaño comedido, lo cual es de agradecer a la hora de almacenarla.
El interior de la caja está forrado de piel (o símil) de color beige.
El reloj llega muy bien protegido sobre un cojín asegurado. Predeciblemente, viene acompañado de su pertinente documentación en un compartimiento en el interior de la tapa.
Una vez mostrado el reloj, acaba la sorpresa sobre la configuración que elegí.
Se trata de la versión de 44 mm. Su longitud (“lug-to-lug”) es de 53,8 mm. Evidentemente, la elección de tamaño dependerá del tipo y envergadura de la muñeca de cada uno. Esta versión cuenta con 22 mm entre asas y un escaso grosor de 11,3 mm. El reloj pesa 94 g (la versión manual es más ligera todavía, pesando sólo 79 g).
A continuación, podéis ver algunos de los detalles de la caja.
Como se aprecia de las imágenes, elegí un bisel arenado y una corona tipo “diamante” con el mismo acabado. Es de grandes dimensiones, de ahí que optara por ubicarla a la izquierda, aunque no soy zurdo. Mi preocupación era que se clavaría en la mano debido a su envergadura, pero el resultado de esta configuración es que se clava en el brazo… Exagero… Pero sí que se nota de vez en cuando.
Escogí la versión con fondo ciego, con el tradicional grabado que se observa en los Fliegers originales.
La corona tipo “diamante” es roscada cuando se combina con la opción de calibre automático, explicando mi elección. En combinación con la trasera roscada, el reloj brinda 100 m de resistencia al agua.
En cuanto a la configuración de la esfera, me decanté por el dial lacado negro con agujas azuladas al calor y marcadores y lumen “Old Radium”. También opté por no añadir el logotipo de la marca, para mantener ese “look” nítido tan característico de este tipo de relojes.
El acabado de las agujas y de las impresiones es de altísimo nivel. Y la luminiscencia es simplemente espectacular: brillante y duradera.
A continuación lo podéis ver en mi muñeca de 17,5 cm de diámetro. Obviamente hace falta bastante buena muñeca para poder soportar esta versión de 44 mm, aunque también es cierto que los Fliegers originales contaban con 55 mm de diámetro para ser fácilmente legibles. Deben verse grandes en la muñeca, creo, aunque entiendo que esto será cuestión del gusto de cada uno.
Si esta envergadura os resulta excesiva, tened en cuenta que la versión de 42 mm cuenta con una longitud de 49,8 mm, ya más práctica, mientras que la versión de 40 mm tiene un “lug-to-lug” de 47 mm, una medida que definitivamente creo podríamos considerar apta para muñecas más pequeñas.
De dotación el reloj viene con una gruesa correa de piel negra tipo aviador con remaches y pespuntes de color beige. Es de muy buena calidad y lleva la hebilla debidamente firmada.
Esta versión es automática, por tanto, equipa el calibre ETA 2824-2 o el homólogo Sellita SW200, los dos “caballos de batalla” suizos. Imagino que cuál lleva dependerá de la disponibilidad en el momento de la fabricación del reloj.
La documentación que acompaña al reloj cita que en este caso viene equipado con un Sellita SW200.
Este Flieger Type A me costó €495 (sin IVA, al enviarse a México) más €40 por el servicio de envío a través de DHL.
La marca cita que necesita 4-5 semanas para enviar el reloj, contando desde el momento de la compra. Aunque puede parecer mucho, cada reloj se ensambla según la especificación del comprador a la hora de hacer el pedido. Además, en mi caso, el reloj llegó aproximadamente un mes después de pedirlo. Por tanto, el plazo de entrega prometido por Dekla se cumple, por lo menos en mi experiencia personal.
Conclusión
Si bien es cierto que Dekla no tiene la “herencia” de otras marcas alemanas, al reloj no le encuentro “pero” alguno.
También quiero destacar lo mucho que me ha agradado la transparencia que ofrece la marca sobre el origen de los componentes y dónde se fabrican los relojes. Además, Dekla ofrece una experiencia de compra única y agradable.
Por unos €500 (más IVA si estáis en la UE), no se puede pedir mucho más. La personalización os permitirá diseñar exactamente el reloj que queréis y Dekla os lo suministrará en plazo tras fabricarlo usando componentes de gran calidad (muchos de ellos “manufactura”) y utilizando un confiable calibre suizo.
Si buscáis un reloj tipo Flieger de gran calidad a un precio razonable, definitivamente soy de la opinión que la oferta de Dekla merece vuestra consideración.
Me despido mostrándoos el reloj junto a otros dos modelos “grandes” en mi colección: el Omega Speedmaster y el Bulova Lunar Pilot.
Madre mía que crisis me has dejado… enhorabuena por la adquisición y muchísimas gracias por la presentación, sencillamente espectacular. Me voy a dar una ducha de agua fría
Muchas gracias Roberto por compartir esta magnífica review. He estado “jugando” en la página de Dekla… Me ha faltado darle al “comprar” 🙁
Agradecerte Roberto la oportunidad de presentar en la web esta joven marca que sin duda apunta maneras. ??
Relación calidad/precio… re-lo-ja-zo. Gracias por la excelente presentación.