@thepocketwatchman
Hoy en “The Russian Watch Corner” vamos a examinar un reloj que yo no clasificaría como “inusual”, pero que sí reúne unas características que lo hacen único dentro del amplio espectro de la relojería soviética.
A mediados de los años 50, la industria relojera soviética estaba en plena expansión de marcas y productos. La compra por parte de los soviéticos de la compañía Lip, y la subsiguiente modernización de sus fábricas, estaba dando sus frutos. Cada una de éstas construía en su seno relojes de diferentes marcas, con multitud de modelos en base a un calibre o dos, y sus sendas modificaciones. Creo que este periodo de tiempo representa la “edad dorada” de la relojería soviética. Ya hablamos un poco de ello en nuestros artículos anteriores dedicados al “Sportivnie” y al “Sturmanskie”.
A mediados de los años 60, se reestructuraron las fábricas y se adoptaron nuevas marcas que ya no iban a cambiar hasta la caída del régimen. Muchas de las marcas anteriores desaparecieron y se relegaron al limbo del olvido. Una de estas marcas es “Ural” y es la que da nombre a nuestro protagonista de hoy.
La fábrica de Chelyabinsk (conocida como “Molnija” tras la reestructuración) otorgó el nombre de la principal cordillera montañosa donde estaba situada a nuestro reloj (“Ural” o “Урал”en ruso ).
¿Pero qué cualidades lo convierten en un reloj inusual, o por lo menos “diferente”?
Empecemos por la caja, que está realizada completamente en aluminio. En aquella época el material más común usado para la fabricación de cajas para relojes era el latón cromado. El aluminio se utilizó en contadas ocasiones. Existen algunos ejemplos de las marcas Pobeda, Start y Chaika con cajas de aluminio, pero “Ural” es la primera marca que produce, en un determinado momento, todos sus modelos con cajas de aluminio1. Las cajas eran anodizadas en oro o mediante sales químicas para darles una protección especial y una coloración diferente. En la imagen inferior, extraída de la magnífica colección particular de mi querido amigo Dashiel, podemos ver los diferentes acabados de las mismas.
Otra particularidad es la forma de la caja, con sus asas en forma de gotas de agua que tanto nos recuerda a la estética “Art Decó” que inundó el mercado relojero norteamericano en la década de los años 40 y gran parte de los 50. Además, su tamaño, 40 mm de diámetro, era superior en medida al resto de los relojes en producción. Esto era debido a su calibre, del cual hablaremos más adelante. Este tamaño y su especial estética, lo convertían en un reloj elegante y llamativo.
Encontramos en este catálogo de 1960 su referencia (YH-201K/6).
Otro punto diferenciador, y que ha generado alguna controversia, es su calibre. Aunque no tenemos por ahora ninguna imagen de catálogo, el “Ural” se fabricó en dos versiones. La primera con segundero central y otra segunda sin segundero. En la imagen más abajo podemos apreciar la versión sin segundero y su calibre.
Durante mucho tiempo se creyó que estos ejemplares sin segundero eran modificaciones creadas por particulares, es decir lo que comúnmente denominamos como frankens. La única fuente que confirma la existencia real de estos modelos la extraemos de un manual de reparación de relojes. Aunque sólo sea un párrafo, el texto de imagen inferior así lo confirma. Aun así, a la hora de adquirir un modelo sin segundero, debemos asegurarnos de que su movimiento es original y no sea uno fabricado a posteriori por Molnija (es decir de 1964 hacia adelante) o por el caso contrario, anterior (fabricado en la 2ªWF).
La versión con segundero lleva un calibre más reconocible, como podemos ver en la imagen siguiente.
En esta imagen del catálogo de 1960, que citamos anteriormente, podemos ver su completa descripción.
Los calibres utilizados para la construcción del “Ural” no son más que dos modificaciones (sin segundero y con segundero central) del Chk-6, que a posteriori se denominaron 3600 y 3608, respectivamente. Este hecho lo podemos constatar vía este interesante artículo, o clasificación.
El calibre base fue desarrollado en la 2ª Fábrica de Relojes de Moscú y es conocido como ChK-6. Pasó a denominarse 3602 y ya os hablamos de él, pues también sirvió de base del calibre cronográfico ChK-28 que presentamos anteriormente.
Este calibre fue desarrollado para relojes de bolsillo, y dio pie a una curiosa anécdota. En 1958, la normativa para la construcción de mecanismos para relojes de pulsera de hombre (recogida en el GOST 6519-58) anunciaba expresamente que estos no podían exceder 34 mm de diámetro. Al ser el Chk-6 de 36mm, nuestro protagonista permaneció en una especie de limbo legal durante sus años de construcción y comercialización.
En definitiva, me atrevería a decir que el “Ural” es un reloj poco conocido y hasta diría que poco apreciado entre los aficionados, pero su configuración lo hace realmente especial y merece un hueco en cualquier colección que se precie.
Como siempre hago en estos casos, quiero advertir a los lectores de que los ejemplares construidos antes del 1960, con luminiscencia, estaban pintados con sales de radio. Así que tomad precauciones a la hora de almacenarlos o manipularlos.
1 Si bien es cierto que el grueso de su producción se hizo en aluminio, también se han encontrado cajas fabricadas en latón.
Mucha gracias Miquel. Excelente artículo.
Nos tienes mal acostumbrados. Y por cierto enhorabuena por la colección que tienes.
Excelente articulo Miquel.
Eso si todo me gustaba, hasta llegar a las sales de radio … miedo me dan tus rusos
Gracias Miquel por el artículo, este Ural es una opción buenísima ya que sus 40mm es una medida muy actual.
Siempre se aprende contigo Miquel.
Gracias por compartir conocimientos