@kendosalamanca
Me gustaría aprovechar para presentarme a todos los compañeros aficionados a los relojes en este interesante proyecto que es safonagastrocrono.club.
En este primer artículo que contribuyo, os quería mostrar unos relojes que aunque, a priori, no tienen nada que ver uno con otro, sí tienen un denominador común: son relojes de máxima calidad y con alguna innovación bastante inusual en términos de diseño.
Dial Con Diafragma
Voy a comenzar con una maravilla técnica, completamente mecánica, que consiste en la de incorporar un diafragma (como el de las cámaras fotográficas réflex) al dial de un reloj. La dificultad radica en la elaboración, montaje, equilibrado y movilidad de las micro-hojas que forman este diafragma.
Este diseño se pudo ver por primera vez en 2005, de la mano de GRISOGONO en su modelo “Occhio Ripetizione Minuti”, con un diafragma de doce hojas cerámicas que actúa cuando se activa la repetición de minutos y en esos momentos permite ver el espectacular movimiento de 414 piezas que incorpora.
Esta idea se desarrolla otra vez en 2009, de la mano del ingeniero Cóme de Valbray y una diseñadora, Olga Corsini. Tras dos años intensos de trabajo, presentan la firma relojera “VALBRAY”. Sus exclusivos relojes incorporan un innovador “Oculus System”. Este sistema consta de un dial tipo diafragma con 16 hojas ultra finas que se puede manejar manualmente desde el bisel. Con un rápido movimiento del mismo podemos variar el aspecto general del reloj y obtener 4 estéticas diferentes según se abra o se cierre más el diafragma. Como movimiento toman de base un calibre Valjoux “Gran Date” o ETA “Chronograph”.
Leica eligió a esta marca para lanzar un reloj para conmemorar el 100 Aniversario de la emblemática firma.
Mi unidad es un Valbray Road 66 VR02E, en concreto la unidad 18 de una tirada de 66 ejemplares.
Dial Hemisférico
La siguiente rareza que deseo comentar es la del dial hemisférico. Este diseño conlleva una dificultad máxima. La decoración y terminación del mismo es complejo, a la vez que lo es la curvatura y equilibrado de las agujas, y el descomunal cristal en cúpula necesario para cubrirlo.
El primer ejemplar vió la luz en 2003 y se denominó Magellan 1521 NM, dando nombre a la pequeña empresa relojera que lo hizo realidad.
Hace homenaje al viaje que realizó el explorador portugués Fernando de Magallanes, bajo la bandera de Castilla. Su viaje comenzó en 1519 y tenía por objeto llegar a las Islas de las Especias, pero no por la ruta portuguesa que bordea África y continua por el Océano Índico, sino navegando a poniente, es decir buscando un paso al sur de América que conectara con el recién descubierto Océano Pacífico. Este viaje además pretendía comprobar si la ubicación de las mismas estaba dentro del hemisferio castellano que quedó determinado por el Tratado de Tordesillas.
Tras encontrar dicho paso y después de miles de millas de navegación, llegaron al Archipiélago de Filipinas, unas de las islas de las Especias. Con este viaje se confirmó la esfericidad del planeta. A pesar de que el diámetro de éste era bastante mayor de lo que se suponía, el viaje dejó claro que era posible llegar a las riquezas de extremo oriente navegando hacia poniente. Se confirmo además que parte de las preciadas “Islas de las Especies” estaban efectivamente dentro del hemisferio castellano.
Lamentablemente, en un enfrentamiento con indígenas, Fernando de Magallanes falleció en 1521, y su viaje lo finalizó Juan Sebastián Elcano, y no precisamente buscando un “tornaviaje” por las aguas de Castilla, sino atravesando la peligrosa ruta portuguesa, efectuando de esta manera, y no habiendo sido este su objetivo, la primera circunnavegación del planeta.
El primer modelo de Magellan mostraba el hemisferio norte delicadamente pintado sobre un dial de madreperla. Posteriormente, se hizó una versión que representaba el hemisferio sur del planeta.
Mi unidad es la número 174 de esa innovadora primera serie de relojes Magellan.
Pero las innovaciones no terminan en el dial tridimensional. Este se monta sobre una caja de acero de 43 mm, con 19 mm de altura. Con un revolucionario diseño patentado, y tapa atornillada, también se realizó una versión en oro de 18k. Porta un calibre ETA 2893-2 modificado. con función GMT 24h. La aguja curva con un “sol brillante” no nos da la lectura de la función GMT. Dada la ausencia de marcadores de 24h, señala la posición exacta del sol. Además, la corona se esconde dentro de la cúpula y se integra al “chapter ring” en un ingenioso alarde técnico de diseño.
En el 2006, Seiko lanzó un reloj similar para la campaña “Think The Earth”, con un hemisferio del planeta, pero aquí el mecanismo es mucho más sencillo ya que se trata de un calibre de cuarzo y las agujas se mueven en plano por debajo del hemisferio.
Corum, aprovechando su amplio catálogo de diseños en cúpula, también lanzó un reloj de apariencia similar, el Big Bubble Magical 52, con tres acabados según las zonas del planeta que mostrada. Pero, este reloj tiene el dial plano y la sensación 3D la aporta su cristal extremadamente abombado.
Reloj Sin Corona
El último reloj que voy a presentar me permite homenajear a un peculiar maestro relojero. La pieza en cuestión es el Pita Oceana. Su particular rareza consiste en la ausencia de corona a pesar de ser un reloj mecánico. De hecho, ya hemos visto coronas ocultas en la zona posterior o incluso dentro de la caja, como en el caso del Magellan descrito más arriba.
Un reloj mecánico necesariamente requiere de un sistema de transmisión para darle cuerda y para hacer girar y poner en hora las agujas. Antes de la aparición de las coronas, esto se hacía con una llave. No existía otra forma de hacerlo, y nunca se había fabricado un reloj mecánico de pulsera sin corona, hasta que un relojero español, autodidacta y que pertenece al selecto club de miembros de la Académie Horlogère des Créateurs Indépendants (AHCI), lo consiguió. Sus patentes, Pita RT y Pita TSM, del 2004, son artífices del milagro y hacen uso de la transmisión magnética para aislar la parte del calibre dedicada a mantener la hora de aquella que sirve para dar cuerda y ponerlo en hora. El nombre de este gran relojero es Aniceto Jiménez Pita, y su creación el Pita Oceana 5000 m.
Si esta innovación no fuera suficiente, el autor quiso además que su reloj fuera extremo en cuanto a sus prestaciones de resistencia a la profundidad, llegando a unos increíbles 5000 m. Este logro vino de la mano de sus inventos. El punto más débil de la resistencia al agua en un reloj es su corona y dada la ausencia de ésta, unido a una caja realizada en titanio y su cristal de policarbonato de 8mm, permiten holgadamente al reloj aguantar esta inmensa presión.
Mi reloj es el número 11 de la primera serie de 61 uninades. que se fabricaron exclusivamente para integrantes del Foro RE. Se acompañó de dos cauchos, uno negro y otro azul eléctrico, por si alguien consideraba el reloj “poco” discreto de por sí. Por cierto, el caucho incorpora una pestaña de seguridad que bloquea el sistema de engranajes giratorios que activa el mecanismo, eliminando el riego de un giro accidental. ¡Otra idea brillante del maestro Pita!
Conclusión
Para finalizar, una foto del grupo de “raros” en su caja.
Espero que os haya gustado este detour examinando piezas tan inusuales.
¡Gran estreno Óscar!
Realmente me han encantado los tres, pero el Valbray me parece impresionante. Muchas gracias Óscar por tu gran aportación.
Sorprendentes relojes,estéticamente el primero de ellos me ha encantado y el segundo es de un barroquismo delicioso.
Los tres grandes relojes, diferentes, difíciles de ver y con un plus de ingeniería.
Muchas gracias por mostrarlos ya que son piezas que no suelen mostrarse/verse demasiado por los foros.
Wow Oscar, enhorabuena y precioso articulo.
En cuanto a gustos, sin duda me has ganado con el “PITA”, los divers y yo siempre nos llevamos bien.
Menudo Trío Oscar.
Ya me encantaría tener uno de ellos. Si tuviera que elegir me quedaría el Magallanes.
Felicidades y espero ver más sorpresas tuyas de relojes que desconocía su existencia
Que barbaridad de relojes Óscar. Me parecen soberbios los tres.
Si fuese posible, me gustó ver una foto de la corona del Magallanes, es el que más me gusta de los tres.
Enhorabuena por ellos
Un abrazote
Donde dije gustó, quería decir gustaría…
El corrector…