@mainspring.watch
Roue es una marca independiente brasileña fundada en el año 2017 por Alex Iervolino, un caballero que proviene de múltiples generaciones de coleccionistas de coches antiguos. A Alex le gustan los coches de carreras y el diseño utilitario, hechos que se hacen evidentes al observar el modelo CHR.
Nota del editor:
Este artículo está escrito por @mainspring.watch (Vincent Deschamps).
Es un profesional de los museos con más diez años de experiencia como investigador. Su especialidad es producir experiencias de visita para entes nacionales e internacionales.
También es el fundador del blog mainspring.watch.
Este artículo reproduce, con permiso, un artículo original en inglés publicado el 15/09/2022.
Introducción
Siendo honestos, ya sabemos que no hay escasez de cronógrafos con calibres mecaquartz por debajo de los 300 dólares, por lo que la decisión de esta joven marca de añadir otro a este segmento de mercado parece osada. Para destacar entre la multitud y tener éxito, hay que hacer algo diferente. O bien ofreces un diseño excepcional o unas especificaciones increíbles. Roue (que significa “rueda” en francés) ha hecho ambas cosas y consigue ofrecer relojes de buena calidad, llenos de encanto y con grandes prestaciones.
Fuente:
https://calibre321.com/2022/09/15/off-the-cuff-roue-chr/
El CHR con revestimiento de PVD tiene un diámetro de 41,5 mm, una longitud (“lug-to-lug”) de 48 mm, un grosor de 10,9 mm y una anchura entre asas de 22 mm.
La versión que vemos hoy es una de tres variaciones cromáticas.
Como se puede ver en las imágenes más abajo, el CHR se ajusta perfectamente a mi muñeca de 16 cm gracias a su comedida distancia de asa a asa y su delgado perfil. La caja estilo “tonneau” ayuda sin duda a que el reloj se vea y se sienta muy bien en la muñeca. Debido al movimiento mecaquartz que lleva, también se trata de un reloj ligero.
Aunque el CHR sólo cuesta $250 (€254), viene equipado con un cristal de zafiro plano con revestimiento interior anti-reflectante y dos correas intercambiables: una de silicona para los días calurosos y otra del tipo “rally vintage” para lucirlo en los circuitos de carreras.
Me gusta cuando las marcas optan por un movimiento mecaquartz que sea funcional, en lugar de uno que viene con complicaciones inútiles como un indicador de 24 horas. Roue ha elegido el movimiento Miyota 6S10, que incluye fecha, un subregistro con el segundero a las 6 h, un subregistro de 1/20 de segundo a las 12 h y un totalizador de 60 minutos a las 9 h (personalmente, no me interesa el subregistro de las décimas de segundo, pero supongo que tiene utilidad en el circuito). Al ser un movimiento mecaquartz, la trotadora del cronógrafo recorre la esfera con suavidad y la acción de los pulsadores es satisfactoria.
Acabado arenado mate negro de PVD.
Fuente:
https://calibre321.com/2022/09/15/off-the-cuff-roue-chr/
Una cosa para tener en cuenta sobre este movimiento es que el pulsador situado a las 2 h pone en marcha y detiene la aguja del cronógrafo, mientras que el situado en la posición de las 4 h lo resetea. Además, se puede accionar el pulsador inferior para reiniciar directamente la aguja del cronógrafo sin tener que detenerla primero. Un pequeño truco que incorporan algunos calibres mecaquartz y que me parece útil.
Como habréis observado en las imágenes, toda la caja tiene un revestimiento de PVD negro con textura de chorro de arena. La corona y los pulsadores también tienen un acabado arenado que confiere al CHR un fuerte aspecto de herramienta. Esta sensación se ve reforzada por las correas negras, especialmente la de silicona, que es tan cómoda como práctica. Me imagino sentado durante horas al volante de un coche de carreras en LeMans, inundando el casco con gotas de sudor… Sin embargo, el CHR se sentiría cómodo en mi muñeca (uno puede soñar…).
Especificaciones
Caja
Acero inoxidable 316L con acabado PVD negro.
41,5 mm de diámetro.
48 mm de longitud (“lug-to-lug”).
10,9 mm de grosor.
22 mm entre asas.
Fondo ciego roscado.
50 m de resistencia al agua.
Calibre
Miyota 6S10 mecaquartz.
Barrido de la trotadora a 4 pasos por segundo.
Pulsadores mecánicos con reseteo rápido.
3 subesferas: segundos permanentes, contador de 60 minutos y 1/20 de segundo.
Cristal Y Dial
Cristal de zafiro plano con tratamiento antirreflejos.
Construcción de tres niveles.
Bisel interno con escala taquimétrica.
Juego de agujas tipo lápiz.
Marcadores impresos.
Luminiscencia
Super-LumiNova.
Correa
Silicona o cuero estilo “Racing”.
A Destacar
Como mencioné en la introducción, hay un montón de relojes cronógrafos mecaquartz en el mercado a precios razonables. Me he encontrado con algunos en el pasado que transmiten exactamente lo uno esperaría de su precio. Ya he reseñado otro modelo de Roue que tenía algunos trucos bajo la manga; los mismos que podemos ver en el modelo CHR. En particular, destaca la construcción de la esfera en tres niveles que le da al reloj un gran atractivo visual. La falta de índices aplicados se compensa con esta particular construcción de la esfera. Los subregistros se sitúan más abajo que la sección principal de la esfera, mientras que el anillo taquimétrico amarillo se sitúa por encima de la esfera.
Mirando el reloj desde un ángulo lateral, hay mucho que hipnotiza, especialmente considerando su modesto precio. No menciono el precio para sugerir que uno debería esperar un reloj de menor calidad, aunque a veces sucede. Todos estamos familiarizados con la expresión “obtienes lo que pagas”, pero me complace informaros que esta expresión no es aplicable a la oferta de Roue. Además de contar con un movimiento genial y ofrecer una esfera en capas, el CHR tiene un diseño particularmente atractivo. Me encantan las agujas de los minutos y las horas, parte de las cuales se han pintado de negro para que desaparezcan en la esfera. Además, las agujas de los subregistros tienen una base cuadrada que les da un aspecto utilitario.
Roue también se ha tomado la molestia de enmarcar la ventana de la fecha y ha reducido al mínimo el texto en la esfera. Sólo las palabras “ROUE” y “CHRONOGRAPH” pueden verse en la esfera. Es fácil excederse con la esfera de un cronógrafo, pero en este caso Roue ha hecho un gran trabajo para que sea legible y funcional.
Por último, me encanta el fondo de la caja con un profundo grabado en relieve que muestra una rueda Campagnolo, un guiño al diseño de las llantas del Lamborghini Miura en las que se inspiró el CHR.
¿Tengo objeciones? Sí, dos en realidad. Por un lado, la forma de la corona y los pulsadores. Por otro, el lumen, o más bien su escasez.
La corona es pequeña y está muy cerca de la caja, lo que hace que sea un poco difícil de agarrar y manejar. Me hubiera gustado que Roue hubiera incluido una pequeña muesca en el diseño de la caja, debajo de la corona, para que fuera más fácil agarrarla y tirar de ella. Además, los pulsadores del cronógrafo también son pequeños y se sitúan en una posición baja, lo que dificulta un poco su manejo.
Y por último, el lumen. Lleva poco material luminiscente y no está presente en toda la esfera. Más concretamente, los marcadores de las 12, 3, 6 y 9 h no resplandecen. Sé que es difícil diseñar una esfera con tres subregistros y añadir puntos de luz alrededor, pero he visto cómo se hace y me gustaría que Roue lo hubiera intentado. Además, el brillo está aplicado de forma desigual; las agujas resplandecen mucho más que los índices.
Lo sé, estoy siendo puntilloso. Pero, debéis ser conscientes de estos detalles.
Conclusiones
A fin de cuentas, el CHR es divertido y genial. No quiero sonar demasiado simplista, pero tengo que admitir que es un reloj fácil de llevar y con mucha personalidad. No me gustan demasiado las cajas con forma de tonel, ya que creo que tienden a parecer más grandes en la muñeca de lo que sus dimensiones podrían indicar. Sin embargo y como ya he mencionado antes, al ser delgado, el CHR es muy cómodo en la muñeca. No puedo enfatizar lo suficiente la “cantidad” de reloj que uno obtiene por esos $250 (€254, con impuestos y envío desde Holanda): un movimiento mecaquartz fiable y funcional, cristal de zafiro, caja y pulsadores con revestimiento de PVD y definitivamente, una gran pieza de conversación. Si os gustan los coches de época y las carreras, necesitáis un CHR en vuestra vida.
Para obtener más información, visitad el sitio web de la marca.