“The Holy Trinity” De La Relojería

@munich_watch_lover

En primer lugar, quiero agradecer a @banksandsloane por proporcionar el hermoso rollo de cuero que muestro en las imágenes. Es un producto de altísima calidad digno de los tres relojes de lujo más importantes en mi colección.

Si sois aficionados a los relojes imagino que os habréis topado con frecuencia con el término “The Holy Trinity” (Santísima Trinidad) de la relojería. Se utiliza universalmente para referirse a las tres marcas más importantes en el segmento de los relojes de lujo. Los tres grandes de la relojería.

¿Cuáles son las marcas de relojes de lujo que componen “The Holy Trinity” y cómo acceden a un club tan exclusivo?

¿Qué es lo que distingue a estas marcas?

Pues la respuesta es bastante simple: las tres tienen un gran prestigio, acumulan grandes logros en el mundo de la relojería y ante todo una larga historia ininterrumpida en el sector.

Vacheron Constantin es la marca de relojes más antigua del mundo, con más de 265 años de relojería ininterrumpida. La marca también ostenta el título de fabricar el reloj más complicado de la historia, el impresionante Calibre 57260 con 57 complicaciones.

Si me preguntáis por qué adoro mi Vacheron Constantin Overseas, no es difícil responder. Desde que su predecesor (la Ref. 222) se lanzó como reloj de 37 mm en 1977 para celebrar el 222º aniversario de la marca y para competir contra el Audemars Piguet Royal Oak y el Patek Philippe Nautilus, el Vacheron Overseas ha seguido su linaje de reloj versátil. que difumina la línea entre reloj deportivo y de vestir.

Luego está Patek Philippe, con más de 185 años de historia. Es responsable de más innovaciones en el mundo de la relojería que cualquier otro, incluyendo el primer calendario perpetuo, el primer “world timer” y el primer reloj de pulsera cronógrafo.

Mi Patek Philippe Calatrava Pilot Travel Time Ref. # 5524G es un excelente ejemplo para incluir en la Santísima Trinidad de la relojería. La caja tiene un tamaño inusual (42 mm son muchos para un reloj de Patek) y su utilísima complicación de hora dual permite cambiar de zonas horarias con el mero clic de un botón. Horologicamente hablando quizás no esté a la altura del reciente Patek Philippe 6301P Grand Complications, pero es un Patek.

Audemars Piguet fue fundada en 1875. Con el lanzamiento del Royal Oak en 1972 cambió la industria relojera para siempre. El AP Royal Oak fue el primer reloj deportivo de lujo que se ofreció en acero inoxidable a precio de oro, marcando una tendencia que continúa hasta hoy.

Después del lanzamiento en 1993 del Royal Oak Offshore, más grande y atrevido que su antecesor, en 2011 AP presentó el Royal Oak Offshore Diver (Ref. 15703) en una caja de 42 mm de diámetro y un diseño completamente nuevo. Fue el primer reloj de buceo real producido por Audemars Piguet, con certificación ISO de su resistencia al agua de 300 metros. Un reloj sorprendentemente sutil y, para los que lo saben, un icono moderno.

Es la confluencia de todos los factores (prestigio, logros horológicos y longevidad) la que es imprescindible para estar entre los tres grandes.

Se podría argumentar que el concepto “The Holy Trinity”, por universalmente aceptado que sea, se ha quedado algo desfasado. Esto explica la ausencia de productores contemporáneos de indudable prestigio horológico, quizás a un nivel incluso mas alto que el de los tres grandes. Marcas como Akrivia, F.P. Journe, Kari Voutilainen, Laurent Ferrier, MB&F, Philippe Dufour y Roger W. Smith, además de A. Lange & Söhne y Breguet entre las marcas no independientes, producen hoy en día relojes del más altísimo nivel. Algunas de estas marcas no aportan longevidad y otras no son independientes, aunque esto último no parece ser un criterio aplicado a rajatabla, ya que Vacheron pertenece a Richemont desde 1996.

Pero, ante todo, estar en “The Holy Trinity” depende de la longevidad. Cualquiera puede ser el chico nuevo del barrio… Pero, ¿qué pasará cuando desaparezcan François-Paul Journe o Laurent Ferrier y François Servanin? Es una cuestión muy importante, porque lo que han logrado Vacheron, Audemars Piguet y Patel Philippe es la excelencia continuada durante siglos.

Como empresas han pasado por las peores crisis de la horología para emerger como líderes del sector: la adopción del reloj de pulsera, la revolución del cuarzo, por mencionar algunas. Absolutamente nada ha podido con ellas y, de hecho, es el resto de la industria la que intenta emularlos. Véase el caso de Rolex, una marca que ha pasado de representar por excelencia el reloj herramienta a intentar asociarse con el lujo en el consciente colectivo.

Sólo el tiempo dirá si “The Holy Trinity” seguirá siendo un trio o no y cuáles serán sus componentes, pero por ahora el puesto de los miembros existentes no parece estar en peligro.