Este curioso Omega Genève Chronostop “Driver Dial” era de mi ex-suegro. Aunque nunca llegué a tratarlo, pues falleció mucho antes de conocer a mi ex-mujer, me consta que fue todo un señor, un verdadero “dandy”. Siempre iba elegantemente vestido. Por supuesto, nunca faltaba un buen reloj en su muñeca. ¡Qué lejano parece todo esto! ¡Pero, qué maravilla!
Hoy vamos a ver un reloj vintage de la marca Dogma, en concreto un modelo Prima Sparta, chapado en oro con una hermosa esfera esculpida. Es un elegante reloj de la primera mitad de los años 50, pero de tamaño “jumbo”, es decir bastante grande para la época. Resulta un tamaño sorprendentemente contemporáneo hoy en día.
Hoy os presento el otro reloj heredado que conservo. Fue el último reloj de mi abuelo paterno, un Rotary tres agujas de 33 mm de finales de los años 60/principios de los años 70. Este reloj ha sido “restaurado”, aunque en este caso la restauración se limitó a un muy necesitado servicio y la sustitución de algunas piezas, plexi incluido.
Creo que restaurar un reloj heredado es una forma de devolverle algo a esta afición. Hoy os presento el reloj que usaba mi padre, un Omega 111.024 de finales de los años 60. El gasto que requirió devolverle el lustre a un reloj de 50 años casi nunca nos compensará económicamente, pero lo que emocionalmente aporta es impagable.
@spitfiremkii Un domingo De Agosto, Mallorca. Me cago en sa puta de Judes… Mascullo entredientes. ¿Qué hacemos aquí?, pregunto sin esperar respuesta. Cruzo la mirada con mi buen amigo Biel, me mira y alza ambas cejas. Hemos cazado demasiadas veces juntos para no saber que esto pinta bastante mal. Saco… Leer más »Verbena De Verano