Review SEIKO 7T34-6A00 Flightmaster

@spitfiremkii

Después de unos meses sin escribir, tal vez por la desidia, tal vez por el hastío… Me han convencido para elaborar unas cortas reseñas sobre unos relojes a los que tengo especial cariño.

Entre los aficionados a la relojería muchas veces se cita la figura del “Grial”. El “RELOJ”, en mayúsculas. La pieza que será el culmen de nuestra colección.

Pues hoy no hablaremos de griales, ni de unicornios. Objetos de los más oscuros deseos, muchas veces más ligados al vil metal. Sino que os presentaré relojes que me han transmitido sensaciones muy especiales.

Sensaciones encontradas, a veces incluso de cierre de ciclo.

Relojes que han ido llegando de forma inesperada. Sin buscarlos conscientemente, pero que siempre han estado allí.

La revisión de hoy trata sobre uno de estos relojes tan especiales para mí y que curiosamente ha sido el último en llegar. Se trata de un SEIKO 7T34-6A00 Flightmaster de 1995.

Realmente es una rara avis en mi pequeña colección. De hecho, es el primer cuarzo que he adquirido en más de 12 años “jugando” con relojes. Aunque mi primer recuerdo sobre este reloj se remonta a los años 90 del pasado siglo.

“Bonus, Bona, Bonum….”

Por aquella época lucía una Casio “Moon Graph”. Realmente no sé cómo sobrevivió a mi adolescencia y afortunadamente aun lo conservo. Pero eso es otra historia. A lo que íbamos.

Debía correr el año 1990, cursaba 2º de BUP. Muchas veces antes de entrar en clase o al salir de ellas, varios compañeros recalábamos en casa de mi buen amigo Micky, muy cercana a nuestro centro escolar.

Micky o Miguel, como prefiráis, era muy aficionado a la aeronáutica y al aeromodelismo.

Tardes interminables de aerógrafo, decorando kits estáticos de Supermarine Seafire (versión embarcada del Spitfire) para equipar su portaaviones escala 1/144 (1,8 m de maqueta, se dice rápido). Fines de semana montando un RC Coyote, para luego sufrir la decepción del vuelo o la hecatombe de un mal aterrizaje.

Pero tal vez el recuerdo que más simpatía me despierta son horas y horas delante de un ELBE en B/N, de 12”. Televisor al que conectábamos un Sinclair ZX Spectrum 48K y cargábamos el “After Burner”.

Ya en aquella época éramos unos precursores del Cosplay, partidas y partidas con chupa de piloto y gafas Rayban de espejo (Top Gun marcó una generación) aunque fuera junio y nos cociéramos a fuego lento. Y como no, mi amigo lucía en su muñeca un SEIKO Flightmaster.

Reloj que vi y sin saberlo deseé durante muchos años. Miguel era mi compañero de pupitre, era zurdo, se sentaba a mi derecha y en la diestra lucía ese reloj. Reloj que nos acompañó hasta que finalizamos COU. De hecho le acabo de preguntar si aun lo posee.*

Luego cada uno siguió su rumbo y cuando quedábamos los relojes pasaban, evidentemente, a segundo plano.

Todos estos recuerdos estaban un poco olvidados, hasta que hace unos pocos meses @aviation_watch (Adam) publicó su reseña.

Y hace unas semanas me llegó un ejemplar de 7T34-6A00, el sueño de un adolescente culminado en la madurez. Lo miro y el “Bonus, bona, bonum”, tamizado por la luz anaranjada de un atardecer resuena en mis oídos. Suena su alarma y un olor a lápiz y almizcle satura mi pituitaria. Activo el crono y me sonrojo, recordando las miradas cruzadas al ser cazado. Observando la apenas sugerida turgencia bajo un recatado escote.

A veces un reloj no es sólo un reloj. Y estos momentos no hay “grial” ni “visa” que los pueda generar.

SEIKO 7T34-6A00

Según su número de serie, la unidad que he recibido es de octubre de 1995, un poco posterior a mis recuerdos. Aunque en esencia es el mismo reloj.

La estética del reloj es atemporal y su estado de conservación, en líneas generales, es excelente. No aparenta los 25 años que tiene.

Tras una minuciosa observación encontramos un pequeño despintado en el bisel y alguna raya superficial en la trasera. Estas últimas supongo que debidas a cambios de pila.

El único “pero” sería que no equipa la correa original sino una milanesa genérica. Aunque en mi opinión no combina mal con el resto del reloj.

Considerando lo que pagué por él (<€150) es una excelente compra con una magnífica relación calidad-precio.

Una vez en la muñeca, la primera sensación es que nos encontramos ante una bella herramienta. De hecho, es un auténtico reloj de piloto, cuya denominación oficial era “SEIKO Pilot’s Flight Alarm Chronograph”.

Luce una caja de 40,5 mm de diámetro en acero, aunque en la muñeca parece más pequeño. Combina zonas cepilladas con zonas pulidas. Presenta una distancia de asa a asa (“lug-to-lug”) de 44,5 mm, una altura de 11 mm y una medida entre asas de 20 mm. Esto último nos facilita de sobremanera encontrarle otras correas con las que combinarlo.

Cuenta con un doble bisel. Uno exterior móvil en acero y uno interior fijo, a modo de regla de cálculo.

Bajo el cristal mineral ligeramente abombado encontramos una esfera negra con cuatro subesferas, en configuración 12-3-6-9. Subesferas que se corresponden respectivamente con las funciones siguientes:

• Contador crono 30’.
• Día del mes.
• GMT y alarma.
• Small seconds.

Las agujas son blancas, lumeadas, en forma de flecha. Debo indicar que con el paso de los años el lumen carece de la intensidad de otros relojes de SEIKO que poseo.

En general, encuentro la lectura del reloj rápida y fácil. Y a pesar de contar con 2 coronas y 3 botones, su uso y configuración es bastante intuitiva.

Ahora bien, es preciso indicar que afortunadamente aun gozo de bastante buena vista, pero puedo asegurar que tal vez no es el reloj más adecuado para los que sufran presbicia.

De hecho, tanta información en la esfera nos puede atraer, como es mi caso. Pero también nos puede abrumar, como ya me ha comentado algún compañero de afición.

Valoración, Precio, Mercado

Como ya he comentado, obtuve el reloj a un precio muy contenido a través de un grupo de C-V entre aficionados.

Por Ebay se pueden encontrar unidades en muy buen estado por €300, aproximadamente, e incluso menos con algo de paciencia. Por lo visto, empieza a ser un modelo coleccionable y su precio un valor en alza.

De todos modos, se pueden encontrar piezas por menor precio si estáis dispuestos a asumir desperfectos evidentes.

Descripción Técnica

Característica	Descripción
Caja	Acero 316L
Tamaño	40,5 mm
Trasera	Trasera roscada con grabado Ola Kanagawa
Cristal	Mineral abombado
Estanqueidad	150 m
Bisel exterior	Móvil, metálico pintado con regla de cálculo
Bisel interior	Fijo
Esfera	4 subesferas 12-3-6-9
Calibre	SEIKO 7T34 quartz, sin rubíes
Funciones	Crono 30’ con función tiempo de parada Alarma Hora Segundera a las 9:00 Día del mes Segundo huso horario
Coronas	03:00 Hora/fecha 04:00 Activar alarma y configuración segundo huso
Botones	02:00 Crono 08:00 Set alarma 10:00 Split time y reset crono
Batería	Tipo Maxell 395
Autonomía	3 años aproximadamente
Dimensión del calibre	24,1 x 27,6 mm

* Postdata

Tras meses de no hablar con él, este reloj ha hecho que hoy contactara con mi amigo Micky.

Me ha confirmado que era exactamente igual a “uno” que tenía cuando íbamos al cole.

Y dice “uno” porque tenía los dos modelos, el plateado y el dorado. Y de hecho aún los tiene (que cxxxón) así como una referencia más moderna.

Todo esto tras un larga y divertida charla telefónica, lástima del COVID.

Lo dicho, no son sólo relojes y no sólo es su precio. A veces el unicornio se esconde en el jardín de casa.