Reseña De Aficionado: Stuhrling Maritimer 935

@arthurggonzaleswtcot

Es raro que un reloj de cuarzo me intrigue, pero ese tema de por si ya supondría otro artículo o colaboración.

Aclarado este punto, navegando por la internet me topé con un diver de cuarzo de la marca Stuhrling. Cuarzo que me despertó la curiosidad. Había oído hablar de la marca, pero ya hacía muchos años de ello y nunca le había prestado demasiada atención.

Stuhrling es una marca de relojes relativamente nueva. Se lanzó a finales del último milenio con sede en Nueva York. Hasta ahora, Stuhrling había introducido una variedad de diseños diferentes, en mi opinión nada digno de atención para los aficionados a la relojería, nada que los pusiera en el “mapa”. Sin embargo, la combinación de excelentes estrategias de marketing, precios atractivos y la introducción de algunos modelos nuevos, incluido un Tourbillion, parecen estar motivando últimamente un resurgir de la marca. Hoy os quiero hablar específicamente sobre el Maritimer 935 Quartz, una pieza de la colección Stuhrling Aquadiver.

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No dilatemos la espera. Nada más sacar el reloj de la caja, las sensaciones son muy buenas, se observa una pieza impresionante y atractiva.

Dado el precio del mismo, sinceramente no esperaba mucho; sin embargo, me ha sorprendido gratamente.

El Maritimer 935 viene bien empaquetado en una funda de cartón estándar con la marca Stuhrling impresa en letras doradas. La caja del reloj está bien realizada en cartón grueso y está bellamente decorada por dentro y por fuera. En el interior de la misma encontré una tarjeta de bienvenida, un trapo de limpieza, un elegante sobre con la tarjeta de garantía y obviamente el reloj. Al sacar el reloj de la caja lo encontré grande, sólido y a primera vista bien construido.

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El tamaño de la caja del Maritimer es de 43 mm de diámetro con un grosor de 13,5 mm. Entre asas mide 22 mm. La caja está bien pulida en los lados mientras la cara superior de las asas tienen un acabado cepillado. La trasera es roscada y está profusamente decorada. La corona, también roscada, viene firmada con el logotipo “S”. Es acanalada y está protegida por un ancho guarda coronas.

El bisel es unidireccional tipo “coin edge” (borde de moneda), grueso y firme. Las sensaciones que transmite su manejo son muy satisfactorias, con clics claros y distintivos. El insert del bisel es de aluminio, acabado en un tono pavonado brillante (“gun metal”). Está muy bien intercalado entre el cristal (de Krysterna, ver más abajo) y el bisel. Probablemente sea algo muy bien pensado, ya que da la impresión de que el insert se podría arañar fácilmente. El marcador de las 12 h del insert es grande, luminoso y sobresale lo justo del insert.

Krysterna, el material del que está hecho el cristal, es exclusivo a los relojes Stührling. Fue desarrollado originalmente por la industria de las gafas para mejorar la claridad y la durabilidad de las lentes. Es una fusión de zafiro y cristal mineral, que añade ciertos componentes en comparación con el FlameFusion y el Sapphlex de SEIKO (que es una versión laminada, no fundida, de los mismos componentes básicos). En el listado de materiales de cristales de reloj que publica relojes.wiki, el Krysterna aparece justo debajo del zafiro en la escala de dureza, con 8 Mohs, aunque es importante destacar que es menos susceptible a roturas y grietas por impacto.

El ejemplar del Maritimer que adquirí tiene la referencia 935.04, que corresponda a esfera color verde aguamarina y correa de caucho gris. Esta combinación de colores se desvía bastante de los cánones tradicionales de los relojes de buceo, que suelen tener las esferas negras, azules o grises. Pero no me arrepiento para nada de la elección. La esfera verde es una maravilla y está muy bien equilibrada con las agujas escogidas por la marca y los grandes marcadores de hora. Las agujas de hora y minutos son grandes con relleno luminiscente y el segundero termina en forma de flecha, también iluminada. Los marcadores de hora también son luminiscentes. Por ahora no puedo pronunciarme definitivamente sobre la calidad del lumen. Transitando de luz diurna a interior, se ve bastante brillante, pero este efecto parece desvanecerse rápidamente, en unos cinco minutos, diría yo. Pero en defensa del Maritimer, el reloj no lo he tenido expuesto a la luz solar directa durante mucho tiempo antes de probarlo.

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La ventana del fechador es redonda y está situada a las 6 h, ocupando parte del espacio que le correspondería al índice. Esta posición proporciona simetría a la esfera y considero que es la elección correcta. Además, con estos calibres de cuarzo relativamente pequeños, el peligro siempre es que la ventana del fechador acaba en una posición demasiado centrada, además de romper la simetría, de estar posicionada a las 3 h.

El logotipo de la marca y las descripciones impresas en el dial no son demasiado molestas, dejando un dial limpio y nítido que fluye muy bien con el acabado del insert del bisel. Dicho esto, un elemento necesariamente a destacar es el extenso uso de logotipos en la pieza. El reloj incluye la firma “S” en la corona, el nombre de la marca “STUHRLING” en la esfera, el interior de la correa de caucho y en la trasera. También añade logotipos de una “S” entre alas en la hebilla y en la trasera. Esta última incorpora un grabado con una imagen de buzo, al igual que las características técnicas del reloj. En resumen, muchas señas de la marca… Asumo que es porque está bien orgullosa de la pieza, y motivos tiene, a mi parecer.

La correa de goma es suave, sutil y resistente. El acabado entre asas es a medida, permitiendo un encuentro perfecto entre correa y reloj. Stuhrling afirma que la correa es de caucho, pero en mi opinión ofrece una experiencia más parecida a una de silicona, ya que es muy cómoda y se adapta muy bien a la muñeca pues no es en absoluto rígida. Me alegro de que Stuhrling haya optado por poner la seña de la marca en el interior de la correa, dado que logotipos al reloj no le faltan. La hebilla es de acero inoxidable cepillado con el logotipo de las alas de Stuhrling en una esquina. Un detalle que echo en falta es la posibilidad de cambiar la hebilla rápidamente, ya que no tiene agujeros para sacar su pasador.

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El Maritimer porta el calibre de cuarzo Miyota 2115, con una precisión de ±20 segundos por mes y una duración de la batería de tres años. La vida útil de la batería se puede alargar cuando el reloj no está en uso tirando de la corona hasta la posición de cambio de hora. Esto es algo que recomienda Miyota en su sitio de web. Sólo hace falta asegurarse de que cuando esté en modo de reserva de energía el reloj este guardado en un ambiente libre de humedad y polvo.

He llevado el Maritimer durante dos semanas alrededor de la piscina, dentro y fuera de ella, y la impresión que me ha dado es de un reloj cómodo, funcional y fiable. Creo que este reloj ofrece grandes cosas para lo que cuesta, y lo recomiendo encarecidamente como reloj de uso habitual o para cualquier actividad en la playa o la piscina.

La pieza tiene un PVP en la web de Stuhrling de $725 (americanos), aunque ahora mismo se ofrece por $145. Habría que añadir $25 de envío si se gasta menos de $350 (aunque el envío internacional es gratuito a partir de esta cifra) y las tasas. Esta diferencia entre PVP y precio real denota una política comercial algo disparatada, recordándonos lo que hace Invicta (sobre lo que hablamos en nuestro artículo del Glycine Airman). Sólo conlleva desprestigió de la marca, en mi opinión. A pesar de ello, comparado con otras opciones de relojes con este tipo de características, creo que el precio al que se ofrece actualmente el Maritimer es muy atractivo. Yo tuve la suerte de poder adquirirlo por $95 desde stuhrling.com y en condiciones de venta normales, es decir con la garantía internacional de dos años. También recibí un agradable correo electrónico del Director Ejecutivo dándome la bienvenida a Stuhrling. Sé que estos correos electrónicos se envían en masa, pero no obstante creo que es un toque agradable y algo que no he visto en los relojes de gama alta.

Pienso que por todo lo descrito, el Maritimer 935 es un reloj merecedor de vuestra atención. La resistencia al agua de 200 m lo hace un diver perfectamente funcional y su bajo coste permite usarlo sin miedo en cualquier circunstancia imaginable. Tiene un aspecto elegante, es cómodo de llevar y cumple bastante bien con su propósito. Muchos relojes con estas dimensiones pueden resultar pesados e incómodos, pero con el Maritimer puesto este no es el caso. De hecho, apenas lo he notado en la muñeca hasta que he necesitado saber la hora. ¿Qué más se puede pedir?

¿Me quedaré con este reloj? Definitivamente sí. ¿Número de estrellas que le daría? Dado el precio, soy de la opinión que merece cinco de cinco. ¿Recomendaría este Stuhrling Maritimer? Sí, sin duda.